El fluir psiquico en relato de un naufrago de Gabriel Garcia Marquezpar Ousmane Abdoulatif CHERIF Université Alassane Ouattara de Bouaké - Master 2 2019 |
2-2- ALCANCE POLÍTICO Y SOCIAL2-2-1- A nivel políticoLa historia del naufragio resulta ser una historia real que enlutó al ejército nacional colombiano y por consiguiente a todo el país. Entonces, Relato de un Náufrago no es una ficción aunque de una manera o de otra, se puede creer lo contrario. Es el fiel relato de los acontecimientos contados por el único superviviente del accidente de un destructor de la marina colombiana. Esta versión de los eventos viene a entrar en contradicción completa con lo que había anunciado el gobierno de la época convirtiendo inmediatamente la obra en denuncia política. La revelación hecha por la historia es muy importante en la medida de que saca a luz las violaciones de las reglas establecidas para la protección de los barcos de la marina y sin duda, tuvo repercusiones políticas en el país. Esta revelación, contó García Márquez, sacó a luz tres faltas enormes: primera, estaba prohibido trasportar carga en el destructor, segunda, fue a causa del sobrepeso que la nave no pudo maniobrar para rescatar a los náufragos, y tercera, era carga de contrabando: neveras, televisores, lavadoras, estaba claro que el relato, como el destructor, llevaba también mal amarrada una carga política y moral que no habíamos previsto.8(*) Desde este instante, el pueblo colombiano que había aceptado lo que le había servido el gobierno como explicación, comenzó a agitarse, y a sospechar al gobierno. Lo que no sabíamos ni el náufrago ni yo cuando tratábamos de reconstruir minuto a minuto su aventura, era que aquel rastreo agotador había de conducirnos a una nueva aventura que causó un cierto revuelo en el país...9(*) Ese presidente Gustavo Rojas Pinillas ya tiene mala fama en la opinión pública por ser no sólo un putchista ya que llegó al poder mediante un golpe de Estado en junio de 1953 sino que también y sobre todo por haber matado a estudiantes que manifestaban pacíficamente en el centro de la capital. En efecto, el 9 de junio de 1954, tropas del ejército dispararon contra un grupo de estudiantes que protestaba por el asesinato de un compañero a manos de las fuerzas armadas, con el resultado de doce muertos. Por último, en enero de 1956, los asistentes a una corrida de toros abuchearon a María Eugenia Rojas, y, para vengar el honor de la hija del dictador, una semana más tarde la policía secreta golpeó con palos y lanzó por la gradería de la misma plaza de toros a quienes se negaban a aclamarla. En la agresión se produjeron un número de heridos y muertos jamás precisado.10(*) Colombia estaba entonces bajo la dictadura militar y folclórica del general Gustavo Rojas Pinilla, cuyas dos hazañas más memorables fueron una matanza de estudiantes en el centro de la capital cuando el ejército desbarató a balazos una manifestación pacífica, y el asesinato por la policía secreta de un número nunca establecido de taurófilos dominicales, que abucheaban a la hija del dictador en la plaza de toros.11(*) Entonces, la serie de artículos de El Espectador de Bogotá que relata el accidente del destructor tal como sucedió realmente vino a posicionarse como una frente libre entre el pueblo colombiano y su gobierno porque constituye la mayor denuncia contra él. Vino a poner en evidencia las actitudes ilegales cuyas consecuencias fueron a base de la tragedia. En efecto, el Relato del náufrago denuncia la actividad de contrabando que hacía el Gobierno Colombiano con los barcos de la marina (en este caso el Destructor Caldas, muy famoso por aquel entonces por haber hundido a un submarino alemán en aguas del Caribe durante la segunda guerra mundial). Publicar esta historia tuvo tal impacto que el dictador Rojas Pinilla mandó a cerrar el periódico. Así, lo dice García Márquez: «La dictadura acusó el golpe con una serie de represalias drásticas que habían de culminar, meses después, con la clausura del periódico.»12(*) Sin embargo, esta represión no logró imponer el poder de Rojas Pinilla por largos tiempos. El dictador fue derrocado en mayo de 1957, y ese mismo año se firmó un pacto entre los partidos liberal y conservador para repartirse los cargos en la administración y alternarse en la Presidencia del Gobierno. La población estaba suficientemente cansada y las quejas habían alcanzado todas las aldeas donde llegaban las verdaderas noticias del país. Pero tras la caída del dictador, el país conoció mejor suerte, como afirma García Márquez: «Antes de dos años cayó la dictadura y Colombia quedó a merced de otros regímenes mejor vestidos».13(*) * 8- CEU Universitatis Senioribvs, sabias que ... el 28 de febrero de 1955? Disponible en https://www.universidadmayoresceu.es/blog/senioribvs/sabias-que-el--28-de-febrero-de-1955-/ consultado el 03/05/2020. * 9- GABRIEL, García Márquez, 1970, Relato de un náufrago, Edición Tusquet, Barcelona, pp9-10 * 10- Notas sacadas de GABRIEL García Márquez, 2012, Relato de un náufrago, Editorial VICENS VIVES, Barcelona. P. 12 * 11- GABRIEL García Márquez, 1970, Relato de un náufrago, Edición Tusquet, Barcelona, pp9-10 * 12- Ídem P. 21 * 13- GABRIEL García Márquez, 1970, Op. Cit. p. 21. |
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