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Comunicación y trastornos de conducta alimenticia en el adolescente de preparatoria.

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par Harold Jean
Universidad La Concordia - Licence en Psychologie 2012
  

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NOMBRE DEL PROYECTO:

COMUNICACIÓN Y TRASTORNOS DE CONDUCTA ALIMENTICIA EN EL ADOLESCENTE DE PREPARATORIA.

PROYECTO QUE PRESENTA

Harold Jean

PARA OBTENER EL TÍTULO DE

LICENCIATURA EN PSICOLOGÍA HUMANISTA

CON RECONOCIMIENTO DE VALIDEZ OFICIAL DE ESTUDIOS DEL

INSTITUTO DE EDUCACIÓN DEL ESTADO DE AGUASCALIENTES, SEGÚN ACUERDO No. 917 DE FECHA DEL 29 DE ENERO DE 2007, MODALIDAD ESCOLARIZADA Y PERIODICIDAD CUATRIMESTRAL.

Asesor.M.P.G. JULIÁN ROGELIO REAL GARDUÑO

Aguascalientes., Ags. DICIEMBRE 2012

NOMBRE DEL PROYECTO:

COMUNICACIÓN Y TRASTORNOS DE CONDUCTA ALIMENTICIA EN EL ADOLECENTE DE PREPARATORIA.

PROYECTO QUE PRESENTA

Harold Jean

PARA OBTENER EL TÍTULO DE

LICENCIATURA EN PSICOLOGÍA HUMANISTA

CON RECONOCIMIENTO DE VALIDEZ OFICIAL DE ESTUDIOS DEL

INSTITUTO DE EDUCACIÓN DEL ESTADO DE AGUASCALIENTES, SEGÚN ACUERDO No. 917 DE FECHA DEL 29 DE ENERO DE 2007, MODALIDAD ESCOLARIZADA Y PERIODICIDAD CUATRIMESTRAL.

Asesor.M.P.G. JULIÁN ROGELIO REAL GARDUÑO

Aguascalientes., Ags. DICIEMBRE 2012

Dedicatorias

Dedico esta tesis a todos los que han trabajado para hacer de mí, una un buen ser humano, capaz de integrar todas las dimensiones como espiritual, social, política e intelectual.

También a todas que me hicieron conocer la dulzura del amor en mi existencia.

A mi madre.

A la comunidad haitiana en Aguascalientes.

Agradecimientos

Esta tesis ha sido una labor colaborativa, es como una comida que muchas personas trabajan para su realización desde la siembra, pasa por la cosecha, la cocción hasta la mesa. Por eso y mucho más voy a agradecer a esta persona.

En primer lugar, agradezco a Dios para todo lo que hizo, hace, hará por mí, desde mi concepción hasta este momento.

Quiero agradecer de manera especial, mi señora madre, la Maestra Jacqueline, por su gran ayuda. A mi madrina la Lic. Gertrude Jean, por su ayuda y sus consejos que ella me brinda. A mis hermanos, mis primos, mis tíos y a todos los miembros de mi familia.

Quiero agradecer de manera cariñosa a mi amor eterno Edwine Oriman, a pesar de la distancia.

Ad memoriam de mis abuelos; Alix y Celirose Jean

Quiero agradecer de manera particular al Rector de la Universidad Laconcordia, Ing. José Antonio González Muñoz, es para mí un prototipo. Especialmente por su conferencia «PLAN DE VIDA», que ha sido un suero en mis venas paraimpulsar me a un desarrollo profesional y laboral.

Agradecimientos especiales a las familiares Michaus Melendez, Soto, Zavala Gutiérrez, Berlus Belizaire, Esparza Laroque, Pérez Ortiz, Ortiz Pérez, Jiménez Campos,

Agradecimientos a mis alumnos y mi jefa, por permitirme hacer la investigación en esta prestigiosa institución, su colaboración ha sido muy valiosa.

Agradezco a mi asesor de tesis MPG. Julian Rogelio Real Garduño, quien con su generosidad y ayuda permanente y, fundamentalmente, por la ayuda que me ha dado en todo momento.

A los sinodales, por sus siempre oportunas e inteligentes observaciones han contribuido de forma significativa a mejorar esta tesis de licenciatura.

A mis compañeros de clase, por aceptarme ser parte de una gran familia.

Resumen

En este trabajo de investigación, presento los trastornos alimenticios y la comunicación humana como factores preponderantes causales. Además se presentará otros factores que generan, impactan los trastornos de conducta alimenticia.

En el primer capítulo, presentará diversas teorías sobre el adolescente, como los aspectos fisiológicos, psicológicos, familiares y sociales.Todo eso nos ayuda a tener un panorama completo del adolescente y su contexto.

En el segundo capítulo, se presentará teoría de comunicación humana y sus diferentes enlaces con los trastornos alimenticios en la adolescencia. Hablamos de varios conceptos como la caja negra (el inconsciente), los axiomas de comunicación entre otros.

En el tercer capítulo, presentamos los modelos y teorías de trastornos alimenticios que presentan en la adolescencia. Así como las diferentes escuelas y corrientes psicológicas que hablan de los adolescentes.

En el cuarto capítulo, hablamos de la pirámide de Maslow y los 3 demonios en Gestalt con sus enlaces con los trastornos alimenticios.

En el quinto capítulo, se ve los trastornos con sus características, diagnósticos y tratamientos. Y se presenta también el cuestionario, la encuesta y las gráficas de resultados.

Lista de acrónimos

AN = Anorexia nerviosa

BN= Bulimia Nerviosa

TCA= Trastornos de la conducta alimentaria

CAR= Conductas alimentarias de riesgo

DSM-IV-TR =Manual Diagnóstico y Estadístico

DA =Desórdenes Alimenticios

TPN= Total nutricional parenteral

APA = Asociación de Psicólogos Americanos

Índice de figuras y cuadros

Figura 1. Modelos multideterminados 3

Figura 2. Variable dependiente los síntomas de desórdenes alimenticios 66

Figura 3. Pregunta 1 86

Figura 4. Pregunta 2 86

Figura 5. Pregunta 3 87

Figura 6. Pregunta 4. 87

Figura 7. Pregunta 5. 88

Figura 8. Pregunta 6 88

Figura 9. Pregunta 7. 89

Figura 10. Pregunta 8 89

Figura 11. Pregunta 9. 90

Figura 12. Pregunta 10 90

Figura 13. Pregunta 11. 91

Figura 14. Pregunta 12. 91

Figura 15. Pregunta 14. 92

Figura 16. Pregunta 15 92

Figura 17. Pregunta 16. 93

Figura 18. Pregunta 17. 93

Figura 19. Pregunta 18. 94

Figura 20. Pregunta 19. 94

Figura 21. Pregunta 20. 95

Figura 22. Pregunta 21 95

Tabla 1. Etapas de la maduración del adolescente 3

Tabla 2. Desarrollo cognoscitivo 22

Tabla 3. Intercambio de mensajes 39

Tabla 4. Factores predisponentes, precipitantes y de mantenimiento 63

Índice de estudio

DEDICATORIAS iii

AGRADECIMIENTOS ii

RESUMEN iii

LISTA DE ACRÓNIMOS iv

ÍNDICE DE FIGURAS Y CUADROS v

ÍNDICE DE ESTUDIO vi

I.- INTRODUCCIÓN x

II.- ANTECEDENTES 1

III.- JUSTIFICACIÓN 3

IV.- PROPÓSITO DE LA INVESTIGACIÓN 5

V.- PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA: PREGUNTAS DE INVESTIGACIÓN 6

VI.- HIPÓTESIS 7

VII.- OBJETIVOS 8

VIII.- IMPORTANCIA DEL ESTUDIO 9

IX.- LIMITACIONES DEL ESTUDIO 10

X.- CONCEPTOS CENTRALES 11

XI.- VARIABLES 12

XII.- MARCO TEÓRICO 13

CAPÍTULO I. ADOLESCENCIA 13

12.1 DEFINICIÓN DE ADOLESCENCIA. 13

12.2 PRINCIPALES TEORÍAS SOBRE LA ADOLESCENCIA 14

A) TEORÍA PSICOANALÍTICA DE FREUD 14

B) TEORÍA DE LA ADOLESCENCIA DE ERICKSON: 14

C) VISIÓN PSICOSOCIOLÓGICA 15

D) ESCUELA DE GINEBRA: 15

E) TEORÍA DE DAVID ELKIND: 15

F) TEORÍA FOCAL DE COLEMAN: 16

12.3 CAMBIOS FÍSICOS EN LA PUBERTAD Y ADOLESCENCIA. 16

12.4 CAMBIOS PSICOLÓGICOS 19

12.5 CAMBIOS SOCIALES 24

12.6 ADOLESCENTE Y FAMILIA 27

12.8-ADOLESCENCIA Y LOS DESÓRDENES ALIMENTICIOS 30

CAPÍTULO II 33

13-COMUNICACIÓN HUMANA 33

13.1-CONCEPTO DE CAJA NEGRA. (INCONSCIENTE) 33

13.2 AXIOMAS DE LA COMUNICACIÓN. 34

13.2.1-LA IMPOSIBILIDAD DE NO COMUNICAR. 35

13.2.3 LOS NIVELES DE CONTENIDO Y DE RELACIÓN EN LA COMUNICACIÓN. 36

13.2.4 LA PUNTUACIÓN DE LA SECUENCIA DE HECHOS. 38

13.2.5 COMUNICACIÓN "DIGITAL" Y "ANALÓGICA". 40

13.3- INTERACCIÓN SIMÉTRICA Y COMPLEMENTARIA. 43

13.4 FUNCIÓN Y RELACIÓN: ESENCIA DE LA PERCEPCIÓN. 44

13.5. CIRCULARIDAD DE LAS PAUTAS DE COMUNICACIÓN. 45

13.6 SISTEMAS DE ACTIVIDAD Y COMUNICACIÓN EN LA ADOLESCENCIA 47

CAPÍTULO III 53

14.- MODELO TEÓRICOS DE LOS DESÓRDENES ALIMENTICIOS 53

14.1. -MODELOS ESTRUCTURALES DE LOS DESÓRDENES ALIMENTICIOS 53

14.2 LA PERSPECTIVA DE CAMPO EN PSICOLOGÍA 53

14.3. TEORÍA DE CAMPO DE LA GESTALT 55

14.4 TEORÍA DE CAMPO INTERCONDUCTUAL 57

14.5- EL MODELO PSICOANALÍTICO 59

14.6- MODELOS COGNITIVO-AFECTIVOS 61

14.7 -MODELOS MULTIDETERMINADOS 62

14.8 MODELOS MULTIDETERMINADOS 63

14.8.1- MODELO MULTIDIMENSIONAL DE LA ANOREXIA 63

14.8.2 MODELOS ECOLÓGICOS 64

14.9- MODELOS ESTRUCTURALES DE DESÓRDENES ALIMENTICIOS DE WILLAMSON. 66

CAPÍTULO IV 67

15-HUMANISMO Y LOS TRASTORNOS ALIMENTICIOS 67

15.1 PIRÁMIDE DE MASLOW 67

15.1.1- PRIMER NIVEL: FISIOLÓGICO 67

15.1.2 SEGUNDO NIVEL: SEGURIDAD 67

15.1.3 TERCER NIVEL: AFILIACIÓN Y AFECTO 68

15.1.4 CUARTO NIVEL: ESTIMA 68

15.2 LOS 3 DEMONIOS DE LA GESTALT Y TRASTORNOS ALIMENTICIOS 70

15.2.1-INTROYECTOS: 70

15.2.2 ASUNTOS INCONCLUSOS: 70

15.3.1 EXPERIENCIAS OBSOLETAS: 70

CAPÍTULO V 71

16-TRASTORNOS ALIMENTICIOS, SÍNTOMAS, CARACTERÍSTICAS Y TRATAMIENTOS 71

16.1 CRITERIOS DE DIAGNÓSTICOS DE LA ANOREXIA NERVIOSA (SEGÚN EL DSM-IV) 71

16.2-ANOREXIA NERVIOSA ATÍPICA 72

16.3-TRATAMIENTO 72

16.3.1-PSICOTERAPIA 73

16.3.2-MEDICACIÓN 73

16.3.3 ORIENTACIÓN DE NUTRICIÓN 73

16.3.4-TERAPIA DE GRUPO Y/O DE FAMILIA 74

16.3.5-HOSPITALIZACIÓN 74

16.4-BULIMIA NERVIOSA (DSM-IV) 74

16.4.1 CRITERIOS PARA EL DIAGNÓSTICO DE F50.2 BULIMIA NERVIOSA 74

16.4.2 TRATAMIENTO DE LA BULINIA NERVIOSA 76

16.5 SÍNDROME POR ATRACÓN: 79

16.3.1-TRASTORNO POR ATRACONES (TA) (DEFINICIÓN SEGÚN CIM 10) 80

16.3.2ALGUNOS SIGNOS Y SÍNTOMAS QUE PUEDE MANIFESTAR UN AFECTADO SON: 81

16.3.3 CÓMO SE TRATA AL TRASTORNO POR ATRACÓN? 81

17. CUESTIONARIO 83

17.1JUSTIFICACIÓN DEL CUESTIONARIO 83

CONCLUSIÓN 96

REFERENCIAS xi

ANEXOS xiv

I.-Introducción

Un día por la noche al ir caminando por una calle, encontré a una joven de 16 años de edad, víctima de la bulimia, y me doy cuenta que es un gran problema social que enfrenta la juventud hidrocálida. Bruscamente, me surge una idea de cómo puedo yo ayudar y me evoco a investigar esta problemática.Trabajando con adolescentes como Docente de idiomas en el Instituto Aguascalientes, percibo que el lenguaje verbal tiene un impacto corporal en el adolescente, desde de la entonación de voz y la forma de expresar, este vocabulario son inadecuados para los mismos. Esta investigación va más allá de la comunicación verbal, no verbal y especialmente la distorsión del lenguaje que visualiza las causasde los trastornos de conductas alimenticias.

En este trabajo se presentará los trastornos alimenticios según el DSM IV como enfermedades causadas por la  ansiedad y por una preocupación excesiva por el peso corporal y el aspecto físico, relacionada con la alteración de los hábitos alimenticios comunes.Los TCA tienen orígenes social, familiar, escolar, psíquico, genético etc. se refiere a que los medios de comunicación tienen mucha influencia en la imagen corporal. La persona que padece algún trastorno en su alimentación basa en la  comida, en particular significante al que la persona enferma otorga un significado específico de acuerdo a diversos factores psicológicos y evolutivos todos los pensamientos y actos que forman parte de su cotidianeidad, sintiéndose dependiente de esa idea, con lo cual el alimento se convierte, en el eje a partir del cual gira la vida y el mundo de relación de la persona que padece el trastorno.

Estas conductas alimenticias pueden o no alterarse voluntariamente, esto está sujeto a factores internos y externos como el nivel de  autoestima, presiones familiares, frustración por tener  sobrepeso, comparación constante con alguien cercano por parte de un familiar o amigo, etc. Generalmente estos tipos de trastornos en la alimentación, más allá de los síntomas que encierra cada uno en especial, son acompañados por un marcado aislamiento de la persona, excesivo cansancio, sueño, irritabilidad, agresión (sobre todo hacia personas conocidas y miembros de la familia), vergüenza, culpa y  depresión, registrándose un trastorno en la identidad a partir de la nominación de la enfermedad.

En esta investigación, se presentará los diferentes modelos de abordaje de los trastornos alimenticios, su manera de diagnosticarlos, sus diferentes maneras de reconocerlos así como los impactos de la comunicación verbal y no-verbal.

II.- ANTECEDENTES

Los trastornos alimenticios tiene su origen entre el siglo XIV y el siglo XIX, el primer caso más cercano TCA es de la princesa Wilgenfortis que se niega a ingerir cualquier tipo de alimento, con propósito de ser tan delgada que ningún hombre la desee. En el siglo XIX, se estableció la delgadez corporal como prototipo de la belleza y del éxito social. Lo que esta al origen de varias enfermedades y deficiencias cardiacas.

Desde la década de los 70s se ha despertado gran interés en estos síndromes por el aumento alarmante de casos, y desde la tercera edición del DSM, en 1980, aparecen como entidades nosológicas perfectamente individualizadas. Inicialmente se ubican dentro del grupo de trastornos de inicio en la infancia niñez y adolescencia, pero en la cuarta edición en 1994, se les ha dado un apartado independiente, el de trastornos de la conducta alimentaria, quedando separados de la pica o alotrofagia, el trastorno por rumiación o mericismo y el negativismo infantil a comer que tienen una etiología y curso muy diferente. Así, están circunscritos a la infancia y la niñez y tienen su origen en una privación afectiva y estimular, siendo muy frecuentes en niños acogidos en instituciones públicas, niños maltratados (abuso o negligencia físico o emocional) y niños con retraso mental o malformaciones.

Watzlavick considera que hay 5 axiomas de la comunicación humana en su primer axioma de comunicación intitula imposibilidad de la no-comunicación,toda comunicación tiene un aspecto de contenido y un aspecto relacional, La naturaleza de una relación depende de la puntuación de las secuencias de comunicación ente los comunicantes, comunicacióntanto digital como analógicamente, todos los intercambios comunicacionales son simétricos o complementariosnada hay que sea lo contrario de la comunicación o es imposible no comunicarse. Toda conducta es siempre un mensaje, de lo que se desprende que es imposible no comunicarse. El axioma tendrá una gran importancia en la esquizofrenia (precisamente como la negativa a comunicarse, es decir, a conducirse: interesa comprender que la comunicación es un "compromiso "y que, en sí misma, no es sólo una relación entre sujetos, sino también una relación "a través de un o en un medio o contexto".

Según Jakobson, el problema de las funciones está vinculando al del medio de comunicación, vehículo del mensaje o adoptando una termología de moda en la actualidad.

El define las relaciones entre el mensaje y el objeto al que hace referencia. Además, él habla de la interacción entre la función referencial (objetividad, cognoscitiva) y la función emotiva (subjetiva, expresiva). El lenguaje corporal, no es más que lo que se transmite por medio de movimiento o gestos, delata tus sentimientos o percepción acerca de la persona con la que está interactuando.

III.- Justificación

Los TCA son un problema de salud mental pública, cuya importancia ha sido reconocida desde hace ya más de tres décadas en los países desarrollados. En los primeros años de la investigación acerca de TCA, se consideraba que estos eran un problema de mujeres jóvenes de clase alta, y casi exclusivo de los países altamente desarrollados (Brumberg, 2000). Ambas nociones han sido puestas en duda ante el reporte de un gran número de casos, y de porcentajes importantes de actitudes y conductas alimentarias de riesgo en diversas partes del mundo (Gordon, 2001). Actualmente los reportes en países desarrollados muestran frecuencias similares en distintos niveles sociales (Gard y Freeman, 1996). Es probable que la exclusividad de nivel socioeconómico se haya debido a un sub-registro provocado por la dificultad al acceso a servicios de atención psiquiátrica. Los trastornos de conducta alimentaria están a la orden de nuestra vida cotidiana. En la etapa de adolescencia que es un cambio drástico en el desarrollo Bio-psico-social; mucho adolescente tiende aproyectar un otro imagen. En este caso, los trastornos de conducta alimentaria pueden aparecer.

Hasta hace poco tiempo en México parecía existir el consenso no explícito de que los TCA eran un problema minoritario, y ocuparse de él resultaba de alguna manera frívolo frente a la importante presencia de problemas como la tuberculosis, la desnutrición, o la esquizofrenia. La principal justificación para lo anterior estaba en la escasa o nula demanda de atención por TCA. Este fenómeno pudo haber obedecido a alguna de cuatro causas, o a una combinación de ellas. En primer lugar, es posible que, efectivamente, hasta la década de los 80, los casos de TCA fueran casi inexistentes en México. En segundo, al no haber conocimiento por parte de la población de que se trataba de un padecimiento psiquiátrico, la búsqueda de atención podría haber sido menor a la que hay en la actualidad, cuando el tema de los TCA es ampliamente discutido en los medios de comunicación masiva. En tercer lugar, la cobertura de servicios médicos en México no alcanza a gran parte de la población, y menos aún en el caso de los servicios psiquiátricos especializados. Por último, aún si los pacientes acudían a un servicio médico, es posible que hubieran sido mal diagnosticados, por una falta de conocimiento general al respecto.

Esta investigación es importante ya que puede beneficiar al Estado de Aguascalientes, en la medida de este trabajo dan a conocer muchos factores por lo cual tienen impacto directo sobre los trastornos de conducta alimentaria en los adolescentes.

Se busca a relacionar los diversos criterios del impacto del lenguaje verbal y no-verbal en el adolescente en sus consecuencias, que genera un estado latente en los trastornos de conducta alimentaria.

Está investigación permitirá la preparatoria a obtener una visión amplia del estado psicológico en el adolescente ante el impacto del lenguaje en la conducta alimentaria para la canalización y su atención profesional para que eso repercuta en su beneficio de su rendimiento escolar y su beneficio.

IV.- Propósito de la investigación

En esta investigación, se presentará los diferentes modelos de abordaje de los trastornos alimenticios, su manera de diagnosticarlos, sus diferentes maneras de reconocerlos así como los impactos de la comunicación verbal y no-verbal. Este trabajo proporcionara herramientas necesarias para diagnosticar, tratar y dar elementos de soluciones a los adolescentes que parecen de algún tipo de trastornos alimenticios.

Así como ver los diferentes elementos comunicativos que impactan en esto dicho trastornos utilizando las teorías relativas a la comunicación humana.

V.- Planteamiento del problema: preguntas de investigación

Existe relación entre lenguaje verbal y no-verbal con los modelos estructurales de los trastornos de la conducta alimentaria?

VI.-Hipótesis

v La comunicación influye en los TCA, ya que el adolescente tiende a ser influenciado por los medios de comunicación como programa de televisión.

v Existe un gran porcentaje de adolescentes que no han sido atendido por TCA y ya que hay muchas estigmatizaciones de estas conductas.

v El lenguaje verbal y no verbal es de gran impacto en los TCA y ya que la comunicación nos da la posibilidad de entablar relaciones y si estas se encuentran en conflicto por ende existirá conflicto con el sí mismo.

v La relación familiar es una importancia capital en el adolescente y ya los conflictos en la familiar son multifactoriales y esto que puede provocar un conflicto psicológico que puede repercutir en las conductas alimenticias.

v Capacitar a los titulares, administrativos y padres de familia permitirá de detectar los TCA y de canalizar el adolescente con un TCA y atenderlos.

VII.-Objetivos

Objetivo General

Dar a Conocer El Impacto del Lenguaje verbal y no-verbal. En los trastornos de conducta alimentaria en el Adolecente Del Instituto Aguascalientes, A.C. (Marista)

Objetivos específicos

· Conocer La comunicación que influye en los trastornos de conducta alimentaria en el adolescente.

· Identificar el porcentaje de adolescentes queno han sido atendidos por trastornos de conducta alimentaria y que sufren de los TCA.

· Reconocer el impacto que genera los modos de lenguaje verbal y no verbal en el adolescente en el desarrollo del TCA.

· Conocerla relación padres e hijo, para reestructurar el lenguaje verbal y no-verbal que puedan llevar al adolescente a desarrollar un trastorno de conducta alimentaria.

· Crear programas especiales para la prevención los TCA en el adolescente y capacitar a los titulares, administrativos y padres de familia para la identificación de tales parecimientos.

· Crear un centro de atención integral para paciente con TCA con psicólogos de diferentes corrientes, médicos, nutriólogos, dentistas etc.

VIII.- Importancia del estudio

Al ver los números que revelan las intuiciones de salud y las cantidades de adolescentes que están atendidos por TCA, un estudio minucioso es importancia capital para dar a conocer que impacto que tiene la comunicación dentro de los trastornos alimenticios junto con los diferentes modelos estructurales utilizando diferentes teorías.

IX.-Limitaciones del estudio

En el estado de Aguascalientes, no contamos con un centro que se dedica específicamente a los trastornos alimenticios. No contamos con muchos especialistas en la materia. El Gobierno del Estado no dispone de presupuesto para atender específicamente los trastornos alimenticios

Además, la Universidad La Concordia no cuenta con un centro de investigación. No disponen de presupuesto para hacer esta investigación.

No contamos con suficiente tiempo para hacer esta investigación, por el campo es muy amplio y da mucho de qué hablar.

X.-Conceptos centrales

Palabras claves:

Trastornos de la conducta alimentaria: se refiere en general a trastornos psicológicos que comportan anomalías graves en el comportamiento de la ingesta, es decir, la basa y el fundamento de estos trastornos se encuentra en una alteración psicológica. Se entiende, pues, que el síntoma externo podría ser una alteración de la conducta alimenticia (dietas prolongadas, pérdida de peso...).

Anorexia Nerviosa:El término anorexia tiene su origen en la lengua griega y está formado por dos vocablos: a/an (una negación) y orégo («apetecer»). Se trata de un síntoma frecuente en distintas  enfermedades y estados fisiológicos que consiste en la reducción del apetito, lo que puede llevar a que la persona comience a ingerir menos alimentos.
Bulimia Nerviosa:La bulimia es una palabra de origen latino (bûlîmia), que a su vez deriva del griego. El término hace referencia a alguien que siente un deseo exagerado de comer, sin que logre saciar su apetito.

Comunicación humana:intercambio de información entre las personas por medio de un canal.

Axiomas de la comunicación: es una verdad evidente, algo que no requiere demostración, sobre la cual se construye y sustenta un cuerpo de conocimientos. La palabra proviene del griego áîéùìá, que significa «lo que parece justo».

Adolescencia: La etapa que llega después de la niñez y que abarca desde la pubertad hasta el completo desarrollo del organismo es conocida como adolescencia. El término proviene de la palabra latina adolescentia.

Familia:Es un conjunto de personas que conviven bajo el mismo techo, organizadas en roles fijos (padre, madre, hermanos, etc.) con vínculos consanguíneos o no, con un modo de existencia económico y social comunes, con sentimientos afectivos que los unen y aglutinan. Naturalmente pasa por el nacimiento, luego crecimiento, multiplicación, decadencia y trascendencia.

Escuela: El término escuela deriva del latín schola y se refiere al espacio al que los seres humanos asisten para aprender. El concepto puede hacer mención al edificio en sí mismo, al aprendizaje que se desarrolla en él, a la metodología empleada por el maestro o profesor, o al conjunto de docentes de una institución.

XI.-Variables

Variables Dependientes:

Ø Comunicación verbal y no verbal

Ø Identificar los TCA.

Ø Comunicación y relaciones familiares

Ø Capacitación, talleres y conferencias

Variables independientes:

Ø Medios de comunicación.

Ø La estigmatización social de los TCA.

Ø Los conflictos en la relaciones.

Ø La relación familiar.

Ø Titulares y administrativos.

XII.- Marco teórico

Capítulo I. Adolescencia

12.1 Definición de adolescencia.

El adolescente ha sido estudiado por varios autores de diferentes disciplinas. Las ideas a veces han sido similares o contradictorias. A través del tiempo el estudio de la adolescencia ha sido enfocado de diferentesformas: filosófica, histórica, socia, biológica y sexual. Para Jean Jacques Rousseau (1712-1778) hizo losprimeros intentos de estudio de la psicología del adolescente con ciertos criterios derigor científico, influido fuertemente por el positivismo. En 1891,William Henry Burnham publica su conocido trabajo «Thestudy of adolescence», dando comienzo auna serie de indagaciones continuadas por Hall; quien en 1904 destacó vívidasdescripciones de comportamiento de esta edad en su libro «adolescencia». Por su ladola escuela alemana aportó una visión renovada y con un criterio ya no solamenteexperimentalista sino también sociológico en torno a la evolución psicológica delindividuo.

En Suiza, destacó Jean William Fritz Piaget; quien son relevantes sus estudios acercade la evolución del pensamiento abstracto, el lenguaje y la elaboración simbólica. Contodo esto se da amplitud a las áreas o factores individuales y socioculturales queintervienen en el desarrollo del adolescente; convirtiéndose en un concepto querecubre distintas realidades, experiencias y, por tanto, diferentes vivencias yvaloraciones.

El término adolescencia hace alusión al «período de crecimiento y desarrollo humanoque transcurre entre la pubertad y la edad juvenil. Su aparición está señalada por lapubertad, pero la aparición de este fenómeno biológico es únicamente el comienzo deun proceso continuo y más general, tanto sobre el plano somático como el psíquico, yque se prosigue por varios años hasta la formación completa del adulto» (Merani, 1979).

La adolescencia es un tiempo de transición. Etimológicamente la palabra «adolescente» proviene de adolecere: de falta y en latín,ad: hacia y olescere: forma de olere; de crecer, que en conjunto significa transición oproceso de crecimiento.Se puede decir que hacia los once o doce años, los niños se acercan a esta etapa deldesarrollo, sin embargo no existe una edad precisa que establezca el inicio para DianaGuelar yRosina Crispo (2000). La adolescencia se prolonga desde que comienza aproducirse la madurez sexual, hasta que la persona alcanza la condición social deadulto independiente, finalizando hacia los dieciocho años de edad,De acuerdoSerrato (2000).

Se le llama pubertad a la madurez biológica y adolescencia al período que le siguepara encontrar la madurez emocional y social. La cultura moderna la adolescencia abarca un período de por lo menos 10 años y tanto su inicio como su final son poco precisos.Este proceso de tránsito se determina por varios factores que son según Dulanto (2000):la vida en familia, la experiencia escolar, el marco cultural que ha estructurado elmundo social para la puesta en práctica de normas y límites que forman la baseeducativa y explican la experiencia de vida comunitaria, y las condiciones económicas ypolíticas que imperan en la generación que pasa por la experiencia de ser adolescente.A continuación revisaremos algunos aspectos que enmarcan y caracterizan dichoperíodo.

12.2PRINCIPALES TEORÍAS SOBRE LA ADOLESCENCIA

a)Teoría psicoanalítica de FREUD

El adolescente busca a descubrir su sexualidad por ende quiere atraer sexualmente a su entorno. Este puede hacer caer en un TCA para ser más atractivo. Para Freud; la teoría la adolescencia es un estadio del desarrollo en el que brotan los impulsos sexuales y se produce una primacía del erotismo genital.  Supone, por un lado, revivir conflictos edípicos infantiles y la necesidad de resolverlos con mayor independencia de los progenitores y, por otro lado, un cambio en los lazos afectivos hacia nuevos objetos amorosos.

b) Teoría de la adolescencia de ERICKSON: 

Los adolescentes a veces, entran en conflictos con su imagen personal. Según Erick ERICKSON; la adolescencia es una crisis normativa, es decir, una fase normal de incremento de conflictos, donde la tarea más importante es construir una identidad coherente y evitar la confusión de papeles.

c) Visión psicosociológica:  

Muchas veces, el medio externo tiene una gran influencia sobre la conducta alimenticia del adolescente. Esta visión subraya el impacto de los factores externos.  La adolescencia es la experiencia de pasar una fase que enlaza la niñez con la vida adulta, y que se caracteriza por el aprendizaje de nuevos papeles sociales: no es un niño, pero tampoco es un adulto, es decir, su estatus social es difuso.  En este desarrollo del nuevo papel social, el adolescente debe buscar la independencia frente a sus padres.  Surgen ciertas contradicciones entre deseos de independencia y la dependencia de los demás; puestos que se ve muy afectado por las expectativas de los otros.

               

d) Escuela de Ginebra:

El adolescente tienecambio cognitivo y relacional quepuede influenciar en su conducta alimenticia. PIAGETseñala la importancia del cambio cognitivo y su relación con la afectividad.  El importante cambio cognitivo que se produce en estas edades genera un nuevo egocentrismo intelectual, confiando excesivamente en el poder de las ideas.

 

e) Teoría de David ELKIND:  

El adolescente tiende a ser egocéntrico además obsesivo por su imagen por ende puede tener problemas de TCA. David ELKIND, como autor de orientación piagetiana, habla de dos aspectos de ese egocentrismo adolescente: «la audiencia imaginaria», que es la obsesión que tiene el adolescente por la imagen que los demás poseen de él, y la creencia de que todo el mundo le está observando;  y  «la fábula personal» que es la tendencia a considerar sus experiencias como únicas e irrepetibles.

 

f)Teoría focal de COLEMAN:  

La adolescente es un periodo de gran crisis emocional y alimenticia.COLEMAN1(*) toma a la adolescencia como crisis, si bien los conflictos se dan en una secuencia, de tal forma que el adolescente puede hacerlos frente y resolver tantos conflictos sin saturarse. 

 

12.3 Cambios físicos en la pubertad y adolescencia.

El aspecto físico del adolescente es muy importante para relacionarse con su entorno. A veces, puede caer en los TCA bajo la influencia del mismo para satisfacer la adhesión a los pares. Hay adolescentes que no comen para estar a la moda o algunos comen mucho por el rechazo familiar.

A grandes rasgos en el proceso puberal se dan los siguientes cambios físicos:

1. Crecimiento y maduración del aparato genital

2. Aparición de los caracteres sexuales secundarios

3. Crecimiento acelerado del sistema músculos esquelético

4. Adquisición de la capacidad de procreación.

Al respecto Tanner y Marshall2(*) (en Dulanto, 2000) proponen 5 etapas para describir la maduración de los adolescentes:

 

Etapa I

Etapa II.

Etapa III.

Etapa IV.

Etapa V

Nombre de la etapa

Pre-pubertad.

Pubertad

Pubertad

Pubertad

Pubertad

Sexo Masculino

Los testículos, el escroto y el pene poseen casi las mismas dimensiones que en la infancia; el volumen testicular medio es de 3cm 3 medido por el orquidómetro de Prader

Crecen los testículos y el escroto; este se arruga, cambia de aspecto y empieza a pigmentarse. Hay poco impulso del crecimiento del pene. Los testículos registran un volumen de 3 a 5 cm3 en la evaluación hecha mediante el orquidómetro.

El pene se desarrolla en sentido longitudinal. El crecimiento del escroto y testículos continúa de manera acelerada; el tamaño de estos últimos es de 5 a 8 cm3 en la valoración con el orquidómetro de Prader

El pene continúa en crecimiento longitudinal y de manera acelerada, en grosor. El glande se desarrolla, y continúan agrandándose los testículos y el escroto; este también se pigmenta cada vez más. El orquidómetro registra entre 8 y 15 cm3 de volumen testicular.

Los genitales adquieren forma y tamaño de tipo adulto. El pene deja de crecer. La evaluación del desarrollo del testículo con el orquidómetro de Prader muestra variaciones entre 15 y 25 cm3.

Sexo femenino

Elevación de la papila mamaria y la aréola es rosada

Hay protrusión del pezón; surge el primer crecimiento del botón mamario y de la aréola del pezón. Puede iniciarse la pigmentación.

La glándula mamaria crece de manera acelerada. El pezón crece al igual que la aréola, pero no se eleva sobre la mama. En la región pectoral hay acumulación de tejido adiposo y también incremento del parénquima glandular.

El pezón y la aréola se levantan sobre la superficie de la glándula mamaria para ampliar su diámetro y formar un segmento diferente a la glándula mamaria. Aumenta el tejido adiposo como base de los lóbulos mamarios que son turgentes y casi como en las adultas

El pezón se proyecta y pigmenta, y la aréola retrocede respecto de la glándula mamaria. Los elementos glandulares se desarrollan por completo. Los genitales externos son casi como en el adulto.

Ambos sexos

Existe vello púbico, el vello encontrado es semejante al que cubre la pared abdominal

El vello púbico inicia su crecimiento en la raíz del pene en varones y en la parte superior de los labios mayores en mujeres. Es fino, largo y ligeramente pigmentado.

: El vello púbico aumenta de cantidad, se hace fuerte, rizado y pigmentado. También se extiende sobre la superficie púbica.

El vello púbico adopta características propias del sexo y de la edad adulta, pero en extensión cubre un área inferior a la del adulto. No se extiende hacia regiones colindantes.

El vello púbico tiende a cubrir la cara interna de muslos, región perineal y abdominal. En mujeres deja de extenderse.

Tabla 1. Etapas de la maduración del adolescente

12.4 Cambios Psicológicos

El adolescente, aparte de cambios biológicos tiene cambios psicológicos. El crecimiento físico aporta una cierta inquietud y de acuerdo a su estructura psíquica, el adolescente tiende a parecer o sufrir de trastorno alimenticio. En la adolescencia, hay muchos cambios drásticos. De hecho, hay varios autores que comparte este punto de vista.

El adolescente y el entorno actúan mutualmente. Como se ha visto la duración del desarrollo pubescente no elimina las condiciones personales, familiares, psicológicas, económicas y sociales de los jóvenes. Los adolescentes interactúan principalmente con otros adolescentes y muy poco con niños más pequeños o con adultos, esto puede tener efectos negativos, pues por un lado se priva de la oportunidad de guiar a los menos conocedores y, por el otro, la separación del mundo adulto significa la pérdida de poder ser aprendicesCraig (2001).

No podemos disociar o separar el adolescente. Los cambios psicológicos que se producen en la adolescencia constituyen el correlato de los cambios que experimenta físicamente, conduciéndolo a establecer una nueva percepción de su propia persona y del mundo. Esto se debe a que simultáneamente se integran aspectos emocionales, la sexualidad, cambios en el pensamiento y procesamiento de información, exposición a riesgos de conducta alimenticia, etc.

En este camino hacia la madurez psicológica o emocional el adolescente suele enfrentar este paso como un reto que en ocasiones resulta ser más brusco que el cambio físico, pues deberá adaptarse y entender las nuevas formas de relación y comportamiento que se plantean de manera particular, conectando su historia personal con el futuro así que su historia familia, su manera de vivir, de comunicar y de interactúan con el símismo.

Se produce la expansión de la capacidad y el estilo de pensamiento que aumenta la conciencia, juicio e intuición. Su desarrollo cognoscitivo se caracteriza por el pensamiento abstracto, lo que quiere decir que el joven tiene la capacidad de formular, probar y evaluar hipótesis, requiriendo no sólo manipular lo conocido y verificable, sino las cosas contrarias a los hechos, perfecciona la capacidad de reflexionar, formular estrategias y planear (Craig, 2001).

Por su parte Josef Von Sternberg (1988, en Craig, 2001) propone que el desarrollo cognoscitivo durante la adolescencia abarca lo siguiente:

· Empleo más eficaz de componentes individuales de procesamiento de información como la memoria, la retención, y la transferencia de información.

· Estrategias más complejas que se aplican a diversos tipos de solución de problemas.

· Medios más eficaces para adquirir información y almacenarla en forma simbólica.

· Funciones ejecutivas de orden superior: planeación, toma de decisiones y flexibilidad al escoger estrategias de una base más extensa de guiones.

Este cambio en la cognición del adolescente representa el crecimiento de su inteligencia (Craig, 2001). Por lo que en algún momento el joven se involucrará o interesará por los problemas sociales, políticos y morales. El adolescente es un ser completo y complejo; es objeto de gran estudio.

Para ilustrar otro aspecto particular del desarrollo cognoscitivo, Coleman (1985) señala la descripción de los estadios del desarrollo moral descritos por Kohlberg3(*), que son los siguientes:

 

Estadio 1:

Estadio 2:

Estadio 3:

Estadio 4:

Estadio 5:

Estadio 6:

Pre-convencional

«Orientación castigo-obediencia». Los comportamientos que son castigados son considerados malos.

«Hedonismo instrumental». Aquí el niño se porta bien a fin de obtener recompensas, para que le devuelvan los favores que hace, etc.

 
 
 
 

Convencional.

 
 

«Orientación hacia las relaciones interpersonales». La buena conducta es aquella que gusta a los demás o les ayuda y que es aprobada por ellos.

«Mantenimiento del orden social». La buena conducta consiste en cumplir con el propio deber, mostrar respeto a la autoridad y mantener el orden social por el propio bien.

 
 

Post- convencional.

 
 
 
 

«Contrato social y/o orientación de la conciencia». Al comienzo de este estadio, el comportamiento moral tiende a concebirse según derechos y niveles generales establecidos por la sociedad, considerada ésta como un todo, pero más tarde existe una creciente orientación hacía las decisiones íntimas de conciencia.

«Orientación según principios éticos universales». En este estadio existe una tendencia a formular principios éticos abstractos y a guiarse por ellos.

Tabla 2. Desarrollo cognoscitivo

Entonces el joven presenta simultáneamente aspectos de niño y de adulto, y esta dualidad en ocasiones provoca inestabilidad y confusión emocional, reflejada en sí mismo y sus relaciones interpersonales.Aunque no todo es confusión, el adolescente busca la autoafirmación y la fortaleza del yo empiezan a solidificarse, se asienta la autoestima, la imaginación sufre el empuje del pensamiento y las fantasías se vuelven cada vez más elaboradas. Estas últimas se alimentan de los símbolos de la comunidad, aunque el joven en ocasiones actúe fuera de la lógica. Macías (2000)

Así también se coincide en que el adolescente tiene dos grandes desafíos que encarar; el primero es la autonomía e independencia de sus padres, y el segundo formar su identidad, en algunos casos para alcanzar estos dos procesos el adolescente se sirve del conflicto y la rebeldía. No obstante, se sabe que en distintas naciones, la gran mayoría de adolescentes se lleva bien con sus padres y tienen una actitud positiva hacia su familia. En este sentido es importante mencionar que el proceso de interdependencia que existe entre el joven y su familia y especialmente con sus padres no es del todo negativo, pues de esta manera se hacen compromisos recíprocos y se da el apego emocional entre ellos (Craig, 2001).

La afectividad y la búsqueda de identidad se desarrollan en la medida en que el sujeto cambia, se integra al grupo al que pertenece y asimila los valores del mismo. Al adolescente se le hace imposible vivir sin depender de otros, en especial del grupo de iguales en el que supera su desconcierto personal, intimando sus experiencias en terrenos como la sexualidad y la moralidad por ejemplo. García (2002)

Para autores como Eric Erickson; la formación de la identidad es el primer obstáculoque los adolescentes han de superar para realizar una transición exitosa a la adultez.De manera ideal, ingresan a la vida adulta con un sentido estable y coherente de lo queson y como encajan en la sociedad». El adolescente recibe una grancantidad de actitudes y roles representado a través de distintos grupos de referencia a los cuales tendrá que copiar, desechar o integrar a lo que terminará siendo suidentidad personal.

Marcia (1980) define cuatro estados o modos de formación de laidentidad:

1. Exclusión: se hacen compromisos sin tomar muchas decisiones. Se manifiesta un mínimo de ansiedad; valores más autoritarios y vínculos positivos y sólidos con los otros significativos(Craig, 2001).

2. Difusión: Todavía no se hacen compromisos; se tiene poco sentido de dirección; se rehúye del asunto. A veces se abandona la escuela o se recurre al alcohol u otras sustancias para evadir la propia responsabilidad.

3. Moratoria: se pasa por una crisis de identidad (quién soy? y hacia a dónde voy?) opor un período de toma de decisiones. Se sufre ansiedad ante las decisiones; se luchacon opciones y decisiones antagónicas.

4. Consecución de la Identidad: se hacen compromisos después de superar una crisis de identidad. Se tienen sentimientos equilibrados por los padres y la familia; es menos difícil alcanzar la independencia.

Los cuatro estados forman parte del proceso de desarrollo, por lo menos en culturas en las que la adolescencia se caracteriza como un largo período y que estos tienen un impacto profundo en la imagen personal del adolescente y sus reacciones ante el estrés.

El adolescente puede comenzar a operar con las formas de pensamiento adulto, puedecomenzar a pensar ya no solo sobre objetos sensibles de los que ha tenidoexperiencia, sino también sobre objetos posibles y constructos abstractos. La crisis deidentidad del adolescente, será entendida como una forma diferente de sentir yvivenciar la propia realidad individual en comparación con la realidad vivida durante lainfancia. Fernández señala que así el adolescente empieza acuestionarse su propia individualidad y tomar conciencia del mundo exterior (Craig 1992).

Al final de esta etapa el adolescente comienza a tener muestras de calma y susdesconcertantes emociones dan lugar a sentimientos más tenues y elaborados(Macías, 2000).

12.5Cambios Sociales

El adolescente es un ser social; ya que la sociedad presenta un prototipo de belleza que puede impactar la conducta alimenticia del mismo. Con los medios masivos, los redes sociales, la moda que se vende un imagen de una persona de un cuerpo perfecto; la imagen del adolescente es privilegiado. Vamos a hacer un pequeño recorrido para hacer un estudio social de la situación.

El devenir histórico provoca cambios culturales importantes, construyendo las bases o arreglos con que se rige determinada sociedad. Según Philippe Aries, la adolescencia surge como una fase social y culturalmente definida sólo a partir del siglo XIX en Occidente (Castro, 2001).

La transformación de ideas y representaciones sociales dan sustento a la vida social, estás se aplican también en los adolescentes que si bien parecen distintos a los de otras épocas (como los de las décadas cuarenta a sesentas), al mismo tiempo comparten trazos comunes. Las transformaciones intrínsecas de cada niño al llegar a la adolescencia se conjugan con su medio social y las peculiaridades de éste (Perinat, Corral, Crespo, Llaberia, Font-Mayolas, Lalueza, Larraburu, Martínez, Moncada, y Rodríguez, 2003). Para poder conocer el impacto que tiene la sociedad sobre el adolescente.

Para poder conocer el impacto que tiene la sociedad sobre el adolescente, John E. Horrocks(1986) considera «necesario conocer algo de la naturaleza del joven como persona, a fin de juzgar lo que puedan ser los resultados conductuales de las influencias de la cultura».

Sin embargo, los intensos cambios que implica la vida actualmente acarrean otros en las normas, metas y valores, provocando el debilitamiento de los vínculos de relación humana tradicionales como: el parentesco, vecindad y comunidad de tamaño humano, aceptando simultáneamente como valor predominante el individualismo exacerbado. De tal manera que las nuevas generaciones se abren a la vida sin apenas reglas Es innegable que ciertas relaciones o fenómenos sociales afectan como se vive la experiencia de la adolescencia, en las actuales generaciones. La modernidad, la creciente inestabilidad en la relación conyugal, con un incremento en el número de divorcios; una sorprendente y a menudo inexplicable, despreocupación de los hijos por los valores trasmitidos por sus padres; y una influencia cada vez mayor de los «pares» en la educación de los jóvenes, tanto como de los medios de comunicación masiva, principalmente la televisión, que hora tras hora penetra en la intimidad de los hogares, moldeando los modos de pensar, de sentir y de comportarse de niños y jóvenes. Por lo que no es extraño, encontrar desajustes, confusión o más aún problemas de salud mental en los adolescentes Castro (2001).

El torbellino del adolescente representa ruptura y confrontación, la primera, se da por el abandono de las identificaciones infantiles y la segunda ante la angustia producida por la autonomía corporal del adolescente frente a su dependencia económica y moral de la familia.

De acuerdo con Howard Gardner; un aspecto que dificulta al adolescente, la resolución de los conflictos relativos a la moralidad social es el hecho de que la sociedad sea conflictiva en sí misma. Su búsqueda de identidad está abierta a una profusión de modelos, muchos de ellos más imaginarios que reales. Miran hacia el futuro con la prospectiva de un imaginario cultural colectivo de dimensiones inusitadas: la globalización, la red de comunicaciones mundial, la representación de un mundo en progreso imparable, incertidumbres ecológicas y económicas, entre otras que integran el panorama de comienzos de siglo. (Horrocks, 1986)

A consecuencia de esto, se prolongan los años de estudio y se pospone la entrada en el mercado de trabajo, alcanzando así la independencia económica más cerca de los treinta años que de los veinte (Perinat 2007).

Una vez instalada la adolescencia, el rol social en el niño(a) se modifica depositándole una mayor responsabilidad y conciencia respecto a las consecuencias que sus actos pueden tener y la adquisición de nuevas relaciones sociales en distintos contextos.La actitud de los adolescentes puede ser radical, es decir, el joven puede involucrarse en actividades impuestas socialmente o adoptar la pasividad como su medio de conducción, simbolizando con esto su acuerdo o desacuerdo con dichos arreglos.

El adolescente desarrolla un nuevo significado de lo bueno y lo malo, lo que cree y el valor que tienen las cosas, teniendo regularmente una visión a la que no renunciará fácilmente pues el hacerlo representaría una amenaza.

Los múltiples factores del proceso obligan a ser cautelosos al estereotipar a los adolescentes o a extrapolar los esquemas y pautas seguidos por una misma generación en una cultura dada en el mismo período. Pues se quiera o no reconocer, los países iberoamericanos, son territorio en el que operan diferentes culturas en silencio o abiertamente y no siempre favorecen el que la adolescencia se viva de manera oportuna, adecuada y congruente (Dulanto, 2000).

12.6Adolescente y Familia

La familia sigue considerándose como «el centro de socialización infantil y juvenil», es la base de la vida del adolescente; el adolescente es el reflejo de su familia. Los problemas familiares tienen repercusión directa o indirecta; a corto, largo y mediano plazo sobre la conducta del adolescente especialmente sobre su conducta alimenticia.

Se propone que a través de ella se transmiten valores, se da sostén emocional y afectivo, promociona el desarrollo adecuado de sus miembros, los prepara y entrena para la convivencia, enseñando la tolerancia a la frustración, el reconocimiento y disfrute de procesos en general (Guelar y Crispo, 2000)4(*).

De acuerdo con Craig, las alianzas entre los miembros de una familia son naturales y sanas; pero es importante que los padres hagan un frente común y establezcan una clara línea divisoria con sus hijos. También deben colaborar para criarlos y corregirlos, ya que un vínculo que excluye a alguno de los progenitores resulta nocivo, pues el que es excluido pierde influencia como agente socializador y figura de autoridad. Además se resalta que las alianzas familiares desempeñan un rol decisivo en el proceso de comunicación.

Se menciona que esta fase del ciclo vital es un período crítico en la historia del adolescente y del resto de la familia. Ya que las interacciones en ella son parte de las fuerzas que facilitan y a la vez limitan el proceso, es decir, cuando se da comprensión y afecto durante este período, la transición es menos abrupta, pero cuando se responde con violencia y autoritarismo a las demandas del hijo o hija, la crisis puede agravarse. Así podemos entender la importancia que adquiere la atmósfera y actitud que prevalezca entre los miembros de la familia, para favorecer o entorpecer el desenvolvimiento y la conclusión de esta etapa. (Macías, 2000).

La forma que adopte el proceso también se relaciona con el tipo de familia al que se pertenece, pues sin duda y sobre todo en la actualidad, podemos encontrar diferentes y nuevas formas de agrupación familiar.

Las hay tradicionales: padre, madre, hijos; de padres separados que permanecen solos, que viven nuevamente en pareja o que han hecho una nueva elección de pareja homosexual, con hijos que conviven alternativamente con cada uno de sus padres; uniparentales en las que solo hay contacto con uno de los padres porque el otro ya falleció, porque no lo conocieron nunca o porque son hijos adoptados por una persona sola. También están las familias «ensambladas» o reconstituidas: caracterizadas por padres que se vuelven a casar, con hijos que conviven con otros de matrimonios anteriores de la nueva pareja de sus padres, y a las que a veces se incorporan medios hermanos o hijos del actual matrimonio. Otro tipo de familia en el que se puede desarrollar el adolescente, es aquella en la que viven con abuelos u otros adultos por fallecimiento de los progenitores o por traslado a otra ciudad, etc. (Guelar y Crispo,2000).

Es indispensable considerar que cada familia se va a organizar de manera particular, requiriendo de reglas y constantes ajustes para funcionar y hacer posible el proceso de separación-individuación, que culminará con la autonomización del adolescente, enmarcando su evolución y regulándola para el alejamiento de la familia sin desgarramiento ni ruptura (Castro, 2001).

Esto no significa que cierta composición familiar sea condición necesaria y estricta para determinar funcionalidad o disfuncionalidad, puesto que la adaptación y funcionamiento que se tenga al interior y al exterior de la familia, se complementará con el contexto psicosociocultural particular en que se viva.

Así, durante el período adolescente, el joven necesita modificar sus hábitos infantiles y adoptar conductas para autoafirmarse, conocerse y reconocerse ante sí mismo y ante el ambiente que lo introduce en cierta medida al mundo de los adultos.

Los padres deberán desprenderse del hijo(a) niño(a), para enfrentar al adolescente quien en algunos casos se opone y rebela, teniendo que llegar a negociaciones y acuerdos, antes innecesarios. De ahí que la flexibilidad o rigidez con que se resuelvan las dificultades, obstruirán o facilitarán el proceso. Cuando los sentimientos de angustia y temor por el crecimiento de un hijo son difíciles de superar, pueden dar lugar a situaciones conflictivas complejas. Lo mejor para los padres es aceptar las ambivalencias, perseverando en la necesidad de comunicación (Guelar y Crispo, 2000).

El adolescente actual aprende cada vez más a desenvolverse solo, sin embargo esto no excluye la necesidad de la presencia, el tiempo, cuidado y atención de los padres. El apoyo que reciba de la familia será fundamental para lograr una expansión y fortalecimiento de la confianza en sí mismo y su núcleo.

Es conveniente que los padres y educadores tomen encuenta las siguientes conductas y actitudes Macías5(*) (2000):

1. Favorecer la autonomía de los hijos al llegar a la juventud, sin menospreciar al estudiante o trabajador, que por razones económicas aún vive en el hogar.

2. Apoyar afectivamente al hijo o hija, pero sin retenerlo, poseerlo o hacerlo sentir que está sometido a la tutela parental (cuando ha llegado a la mayoría de edad).

3. Favorecer la transición de la adolescencia a la juventud sin solapar actitudes regresivas o de búsqueda de sobreprotección.

4. Para el ejercicio de la sexualidad, es necesario prevenir las consecuencias que esto acarrea.

5. Respetar la actitud del hijo que ha decidido no ejercer su sexualidad.

6. En la medida de lo posible, facilitar el desprendimiento del hijo de la matriz familiar y, aunque el hijo o la hija aún viva en casa, evitar controlar sus actos y emociones como cuando era niño.

Los recursos que brinda la familia al adolescente, más tarde se verán reflejados en la escuela y en las agrupaciones sociales a que pertenezca. Se dice «que los padres no solo tienen la oportunidad, sino también el deber de ofrecerles a sus hijos el aprendizaje y las experiencias que les permitan adaptarse al medio» (Horrocks, 1986).

En la medida en que el joven se adapte a las interacciones que se dan en su núcleo familiar, podrá tener un desenvolvimiento más o menos exitoso en las relaciones sociales, permitiéndole entender el sentido de dichas relaciones y las opciones que tiene para su afrontamiento. De lo contrario, «si la familia, la comunidad o el joven tratan o logran posponer, evadir o deformar el compromiso para que se asuma la adolescencia, conseguirán alterar no sólo la secuencia y las finalidades propuestas por la etapa de desarrollo, sino también darán oportunidad de abrir la puerta de la enfermedad psicosocial de la adolescencia» (Dulanto, 2000).

En otras palabras la familia es responsable del desarrollo psicosocial de niños y adolescentes; pues según Macías el avance del individuo a través de la adolescencia estará muy afectado por las expectativas más o menos constantes, adaptativas o inadaptativas, mantenidas por las personas que revisten importancia en su entorno inmediato.

12.8-Adolescencia y los Desórdenes Alimenticios

Los problemas de conducta alimentaria surgen durante el periodo de la adolescencia por lo que es preciso abordar algunas consideraciones al respecto de este periodo de vida del ser humano.

Derivada de la palabra latina adolescere (crecer hasta llegar a la madurez) la adolescencia considerada como una etapa transitoria entre la infancia y la adultez, en la cual ocurren una serie de cambios físicos representa también toda una complejidad psicológica y del mundo social (Jiménez, 2006).

Frydenberg (1997) señala que el periodo de la adolescencia es abordado en el ámbito psicológico principalmente desde dos perspectivas:

1) La perspectiva evolutiva, en la que la adolescencia está vinculada a la teoría psicoanalítica, la teoría del aprendizaje social y las teorías cognitivas entre las que se destaca la Piagetana. Esta perspectiva se centra en aspectos tales como la madurez del sujeto, los conflictos y la identidad, y se caracteriza por la investigación en función de la edad.

2) La perspectiva del ciclo vital.Esta postura en contraste con la del desarrollo, no asume ningún estado de madurez especial, la edad no funciona como una variable que marque o condicione el desarrollo, sino como un simple indicador considerando que el proceso de crecimiento psicológico es un continuo a lo largo de todo el ciclo vital.

Desde el punto de vista del ciclo vital, la adolescencia se percibe como un producto del desarrollo del niño y como un precursor del desarrollo del adulto. No es un período aislado de la vida sino una parte importante en el continuo del ciclo vital.

El enfoque ecológico del desarrollo humano de Urie Bronfenbrenner se inserta en esta perspectiva del ciclo vital proporcionando un marco conceptual y teórico para comprender las relaciones entre los jóvenes y el contexto social. En este modelo el foco de análisis pasa del sujeto a los contextos sociales en los que tiene lugar el desarrollo físico, cognitivo y emocional del adolescente.

El postulado básico de esta postura teórica del desarrollo humano que propone Bronfenbrenner supone la progresiva acomodación mutua entre una persona activa en proceso de desarrollo, por un lado, y por el otro las propiedades cambiantes de los entornos inmediatos en los que esa persona en desarrollo vive. Esta mutua acomodación se produce a través de un proceso continuo el cual es afectado también por las relaciones que se establecen entre los distintos entornos en los que participa la persona en desarrollo y los contextos más grandes en los que esos entornos están incluidos.

Este enfoque se conforma en una disposición seriada de estructuras concéntricas denominada ambiente ecológico el cual está dividido en cuatro contextos: Microsistema (sistemas de creencias, ideología, estilos de vida y formas de organización social prevalecientes en una cultura); Exosistema (entornos que no necesariamente incluyen a la persona en desarrollo como participante activo, pero en los cuales se producen hechos que lo afectan). Romero y Frías en el 2008 lo definen como el sistema de relaciones más próximas de las personas, enmarcadas por las instituciones que median entre la cultura y el nivel individual, como medios de comunicación, organismos judiciales, instituciones de seguridad y la iglesia); Microsistema, Bronfenbrenner, (2002) lo define como el patrón de actividades, roles y relaciones interpersonales que la persona en desarrollo experimenta en un entorno determinado, con características físicas y materiales particulares el cual está caracterizado fundamentalmente por la familia; Mesosistema (interrelaciones entre los distintos microsistemas en los que la persona participa activamente).

Desde esta perspectiva, la adolescencia se sitúa en un momento de transición ecológica durante la cual se produce una modificación de la posición de la persona en el ambiente ecológico como consecuencia de un cambio de rol, de entorno o de ambos a la vez. Toda transición es consecuencia e instigadora de los procesos de desarrollo y depende conjuntamente de los cambios biológicos y de la modificación de las circunstancias ambientales, en un proceso de acomodación mutua entre el organismo y su entorno.

En este enfoque se considera que el adolescente crece y se adapta a través de intercambios con sus ambientes más inmediatos o microsistemas (familia, escuela e iguales) y ambientes más distantes como el trabajo de los padres o la sociedad en general, organizados en estructuras concéntricas anidadas.

Esta concepción actual de la adolescencia vista como un periodo de ajustes a diferentes tareas y cambios del desarrollo que se da generalmente entre los 12 y los 20 años de edad. Se divide en tres etapas o periodos: primera adolescencia (12-14 años), etapa en la que se producen la mayor parte de los cambios físicos y biológicos que se mantendrán durante toda la adolescencia; adolescencia media (15-17 años), etapa en la que los cambios de estado de ánimo son bruscos y frecuentes, expresan una mayor preocupación por su imagen y empieza la implicación en conductas de riesgo, y adolescencia tardía (18-20 años), etapa en que aumenta el riesgo de conductas desadaptativas, tales como el consumo de drogas, conductas agresivas, la conducción temeraria o las conductas sexuales de riesgo (Musitu et al. 2001) la cual se viene alargando en los últimos años debido a que los jóvenes permanecen más tiempo en el hogar parental.

En conclusión, se puede afirmar que la adolescencia supone una transición evolutiva en la que el individuo debe hacer frente a numerosos cambios. A este respecto, una de las diferencias entre este periodo y otras etapas del desarrollo evolutivo es, precisamente, el número de cambios a los que el sujeto se debe enfrentar, así como la brevedad y rapidez de los mismos. Todas estas transformaciones se articulan en tres grandes áreas: cambios en el desarrollo físico o biológico, cambios en el desarrollo psicológico y cambios en el desarrollo social.

Capítulo II

13-Comunicación Humana

13.1-Concepto de caja negra. (Inconsciente)

El adolescente acumula todas las pautas y patrones de la comunicación en la familia y todas estas informaciones se quedan en su inconsciente; ya que no se puede borrar el pasado y todo se suma en una parte de ser y da nacimiento según Friedrich Nietzsche (1844-1900) a la caja negra. El refiere al cerebro que recibe y almacena información de forma consciente e inconsciente. Lo consciente se procesa y genera una comunicación verbal y lo inconsciente genera una comunicación no verbal. De hecho la mayor parte de nuestra comunicación es no-verbal.

Desde la perspectiva de la teoría general de sistemas, la familia es un sistema autocorrector y dinámico y por lo tanto, nuestras observaciones deberán ir dirigidas tanto hacia las transacciones que suceden en su interior, como hacia la estructura interna del sistema; dicho de otro modo, lo que nos interesará será conocer la interacción entre los miembros, sus modos de relación y las reglas que rigen esa relación. Por el contrario, el pasado, el conocimiento de los porque es en las relaciones y la existencia de víctimas y verdugos como consecuencia de aplicar el modelo causa-efecto, no poseerá ningún interés dentro de este enfoque.

Todo esto supone un cambio de perspectiva y un abandono de la investigación intrapsíquica. De todas formas, en el caso de estudiar las conductas de los individuos, estas deberán ser interpretadas en función de la influencia que posean en relación con el sistema, y nunca deberán interpretarse de forma individual. El individuo se considerará como una caja negra en la que no será necesario entrar para explicar su comportamiento.

El concepto de caja negra se tomó del campo de la telecomunicación y de la electrónica, donde a veces resultaba más conveniente pasar por alto la estructura interna de los equipos, dada su complejidad, y centrarse en las entradas "imputs" y salidas "outputs" de los aparatos. También es cierto que observando las entradas y salidas del aparato podíamos hacernos una idea de lo que ocurría dentro o de su estructura interna. Conocer el contenido de la caja negra, no será esencial para conocer el aparato (individuo) dentro de un sistema más amplio del que forma parte. Esta visión modifica el concepto de síntoma ya que no podemos entenderlo como la expresión de un conflicto interno, sino como el extremo de un iceberg de patología familiar.

Muchas veces, reenfocar un problema determinado o un síntoma que ha permanecido intacto tras muchos años de tratamiento profundo, es decir, pasar de los "porqués" a los "para qué" posiblemente nos permita obtener una respuesta. Si tal como hemos comentado antes, toda conducta tiene valor de comunicación, será necesario empezar por exponer algunos principios básicos de la Teoría de la Comunicación Humana desarrollados por Watzlawick.

13.2AXIOMAS DE LA COMUNICACIÓN.

Analizando los axiomas de la comunicación y adaptarlo a la adolescencia, es claro que los masajes que emanen los adolescentes están a veces a otro niveles de comunicación. Del mismo modo los impactos de las pautas de comunicación de los padres hacia al adolescente puede afectarlo en el ámbito escolar, social, familiar y puede poner en peligroso su conducta alimenticia.

A partir de los trabajos de Gregory BATESON, las investigaciones sobre la teoría de la comunicación adoptaron un enfoque sistémico, donde toda conducta era concebida de manera relacionar y representaba una forma de comunicación. La comunicación posee algunas propiedades de naturaleza axiomática (propuestas por Beavin, Jackson y Watzlawick) que pasamos a enumerar y que llevan implícitas consecuencias fundamentales para el estudio de las relaciones.

Un axioma es un enunciado básico que se establece sin necesidad de ser demostrado. Las dos características que poseen los axiomas son: indemostrabilidad y evidencia. Los axiomas no son verdaderos ni falsos en sí mismos: son convenciones utilizadas como principios de derivación de los demás enunciados de una teoría.

Los cinco axiomas que a continuación vamos a mencionar, son propiedades simples de la comunicación que encierran consecuencias interpersonales básicas. Watzlawick y colaboradores los han desarrollado concretándolos del siguiente modo:

13.2.1-La imposibilidad de no comunicar.

El adolescente esta siempre comunicando su estado de ánimo; si es triste, contento, molesto; como vive, come, duerme y sonríe. La comida es un reflejo de estado de ánimo, de la pauta de conductas y de su sentimiento.Es posible comunicar a través de los trastornos alimenticios.

No hay nada que sea lo contrario de conducta. La no-conducta no existe; es imposible no comportarse. En una situación de interacción, toda conducta tiene valor de mensaje, es decir, es comunicación; por eso, por más que uno lo intente, no puede dejar de comunicar. Actividad o inactividad, palabras o silencio, tienen siempre valor de mensaje: influyen sobre los demás, quienes a su vez, no pueden dejar de responder a tales comunicaciones y, por tanto, también comunican.

Por ejemplo: un adolescente que llega a su casa, no saludo a nadie y se dirige directamente a la cocina para comer. O un adolescente que no come por la situación del divorcio de sus padres.

La persona puede "defenderse" de la comunicación del otro, mediante la importante técnica de la descalificación; esto es, puede comunicarse de modo tal que su propia comunicación o la del otro queden invalidadas. Las descalificaciones abarcan una amplia gama de fenómenos comunicacionales tales como autocontradicciones, incongruencias, cambios de tema, tangencializaciones, oraciones incompletas, malentendidos, interpretaciones literales de la metáfora e interpretación metafórica de las expresiones literales.

No es sorprendente que habitualmente recurra a este tipo de comunicación todo aquél que se ve atrapado en una situación en la que se siente obligado a comunicarse pero, al mismo tiempo, desea evitar el compromiso inherente a toda comunicación.

Por tanto, la conducta (comunicación) "alienada" no es necesariamente la manifestación de una mente enferma, sino quizá la única reacción posible frente a un contexto de comunicación familiar absurdo e insostenible.

13.2.3 Los niveles de contenido y de relación en la comunicación.

El adolescente a veces, no tiene los vocabularios suficientes para expresar sus ideas por la relación que lleva con sus padres y su entorno. Pero la comunicación no-verbal nos ayude a entender las pautas de conductas. A veces la comida representa una manera defensiva u ofensiva para decir lo que el adolescente está viviendo. Eso puede causar trastornos de conducta alimenticia.

Toda comunicación poseerá un contenido (lo que decimos) y una relación (a quién y cómo se lo decimos) A través de la comunicación, todos podemos expresar nuestra forma de ser y la visión de la relación la otra persona.

Una comunicación no sólo transmite información sino que, al mismo tiempo, impone una conducta o un comportamiento.

El "nivel de contenido" de un mensaje transmite "INFORMACIÓN".

El "nivel de relación" se refiere a cómo la comunicación sirve para "DEFINIR" el tipo de relación que quiero establecer con mi interlocutor.

Los expertos en computadoras también se enfrentan con estos dos niveles cuando se comunican con un "organismo artificial": Por ejemplo, si una computadora debe multiplicar dos cifras, es necesario "alimentar" esas dos cifras y "dar la orden" de multiplicar. Necesita, por tanto, información (DATOS) e información acerca de esa información (INSTRUCCIONES). Es evidente, que las .instrucciones son de un "tipo lógico" superior al de los datos: constituyen metainformación puesto que son información acerca de información.

En la comunicación humana observamos que esa misma relación existe entre los aspectos de "contenido" y de "relación": el primero transmite los "datos" de la comunicación, y el segundo, "cómo" debe entenderse dicha comunicación. De la misma manera, toda comunicación implicará un compromiso para el que la recibe, pudiendo rechazar, aceptar o descalificar la comunicación.

Cuanto más espontánea y sana es una relación, más se pierde en el trasfondo el aspecto de la comunicación vinculado con la relación. Las relaciones "enfermas" se caracterizan por una constante lucha acerca de la naturaleza de la relación, mientras que el aspecto de la comunicación vinculado con el contenido se hace cada vez menos importante. La capacidad para metacomunicarse en forma adecuada es indispensable de la comunicación eficaz.

Tal como anteriormente decíamos, las personas, en el nivel relacionar no comunican nada acerca de hechos externos. Una persona ("A") puede ofrecer a la otra ("B"), una definición de sí misma; es inherente a la naturaleza de la comunicación humana el hecho de que existan tres respuestas posibles por parte de esta última persona a la definición de la primera:

a) Confirmación:

Los trastornos alimenticios pueden ser una confirmación de las pautas de conductas del adolescente o puede confirmar los riesgos de conductas alimenticias. Hay que ver la figura-fondo de los trastornos alimenticios para poder confirmar.

La persona ("B") puede aceptar (confirmar) la definición que ("A") da de sí misma. Además del mero intercambio de información el hombre tiene que comunicarse con los demás, a los fines de su autopercepción y percatación. La persona es incapaz de mantener su estabilidad emocional durante períodos prolongados en que sólo se comunica consigo misma. Lo que los existencialistas llaman el "encuentro" corresponde a esta esfera. Como afirma el célebre filósofo MARTIN BUBER:

"En la sociedad humana, en todos sus niveles, las personas se confirman unas a otras de modo práctico, en mayor o menor medida, en sus cualidades y capacidades personales, y una sociedad puede considerarse humana en la medida en que sus miembros se confirman entre sí...

La base de la vida del hombre con el hombre es doble, y es una sola: el deseo de todo hombre de ser confirmado por los hombres como lo que es, e incluso como lo que puede llegar a ser y la capacidad innata del hombre para confirmar a sus semejantes de esta manera. El hecho de que tal capacidad esté tan inconmensurablemente descuidada constituye la verdadera debilidad y cuestionabilidad de la raza humana: la humanidad real sólo existe cuando esa capacidad se desarrolla".

b) Rechazo:

Las conductas alimenticias es una forma de rechazar su condición de vida y de las pautas de conductas de sus padres.Otra posible respuesta de la persona ("B") frente a la definición que la persona ("A") propone de sí misma consiste en rechazarla. Sin embargo, por penoso que resulte el rechazo presupone por lo menos un reconocimiento limitado de lo que se rechaza y, por tanto, no niega necesariamente la realidad de la imagen que la persona ("A") tiene de sí misma.

13.2.4 La puntuación de la secuencia de hechos.

Los trastornos alimenticios pueden puntuar la secuencia de los hechos en el adolescente .Para un observador una serie de comunicaciones puede entenderse como una secuencia ininterrumpida de intercambios de mensajes. Sin embargo, quienes participan en la interacción siempre introducen lo que se llama "puntuación de la secuencia de hechos".

En una secuencia prolongada de intercambios, las personas puntúan la secuencia de modo que uno de ellos o el otro tiene iniciativa, predominio, dependencia, etc. Así, a una persona que se comporta de determinada manera dentro de un grupo, la llamamos "líder" y a otra "adepto", aunque resultaría difícil decir cuál surge primero o que sería del uno sin el otro. La falta de acuerdo con respecto a la manera de puntuar secuencia de hechos es la causa de incontrolables conflictos en las relaciones.

Supongamos que una pareja tiene un problema en el matrimonio al que el esposo contribuye con su retraimiento pasivo, mientras que la mujer colabora con sus críticas constantes. Al explicar sus frustraciones, el marido dice que su retraimiento no es más que la defensa contra los constantes regaños de su mujer, mientras que ésta dirá que esa explicación constituye una distorsión intencional de lo que "realmente" sucede en su matrimonio, esto es, que él lo critica debido a su pasividad.

Sus discusiones consisten en un intercambio de estos mensajes:

PADRES

ADOLESCENTE

ME RETRAIGO

TE REGAÑO

PORQUE

PORQUE

ME REGAÑAS

TE RETRAES

Tabla 3. Intercambio de mensajes

En la psicoterapia de parejas, a menudo sorprende la intensidad de lo que en la psicoterapia tradicional se llamaría una "distorsión de la realidad" por parte de ambos cónyuges. A veces, resulta difícil creer que dos individuos puedan tener visiones tan dispares de muchos elementos de su experiencia en común. Y, sin embargo, el problema radica fundamentalmente, en su incapacidad para metacomunicarse acerca de su respectiva manera de pautar su interacción.

Las discrepancias no resueltas en la puntuación de las secuencias comunicacionales pueden llevar a 'impasses" interacciónales, en los que los participantes se hacen acusaciones mutuas de locura o maldad.

Las discrepancias de puntuación tienen lugar en todos aquellos casos en que por lo menos uno de los comunicantes no cuenta con la misma cantidad de información que el otro, pero no lo sabe. Así, por ejemplo, una persona escribe una carta a otra proponiéndole pasar unas vacaciones con ella. Esta segunda persona acepta, pero su carta no llega a destino. Después de un tiempo, la primera llega a la conclusión de que la otra no ha tenido en cuenta su invitación, y decide no interesarse más por ella. Por otro lado, la otra persona se siente ofendida porque no tuvo contestación a su carta con la que esperaba más detalles, y también decide no establecer nuevo contacto. A partir de ese momento, el malestar silencioso puede durar eternamente, a menos que se decidan a averiguar qué sucedió con sus comunicaciones, es decir, que comiencen a metacomunicarse. En este caso, un hecho exterior fortuito interfirió la congruencia de la puntuación.

Estos casos de comunicación patológica constituyen círculos viciosos que no se pueden romper a menos que la comunicación misma se convierta en el tema de comunicación (metacomunicación). Pero para ello tienen que colocarse afuera del círculo.

Se observa en estos casos de puntuación discrepante un conflicto acerca de cuál es la causa y cuál el efecto, cuando en realidad, ninguno de estos conceptos resulta aplicable debido a la circularidad de la interacción.

El concepto de la "profecía autocumplidora" constituye un fenómeno interesante en el campo de la puntuación. Por ejemplo, una persona que parte de la premisa "todos me odian", se comporta, tal vez, con agresividad, ante lo cual es probable que los demás reaccionen con desagrado, corroborando así su premisa original. Lo que caracteriza la secuencia y la convierte en un problema de puntuación, es que el individuo, considera que él sólo está reaccionando ante esas actitudes, y no que las provoca.

13.2.5 Comunicación "digital" y "analógica".

Los trastornos alimenticios pueden aparecer de forma analógica y digital en los adolescentes para poder expresar lo que es, lo que siente, lo que percibe, lo que vive y lo tiene.

Lenguaje:

a) digital: el que se transmite a través de símbolos lingüísticos o escritos, y será el vehículo del contenido de la comunicación. El adolecente, a veces escribe, dice y describe lo que siente.

b) Analógico: vendrá determinado por la conducta no verbal (tono de voz, gestos, etc.) y será el vehículo de la relación.

Funciones: transmitir información.

Definir la relación entre los comunicantes, lo que implica una información sobre la comunicación, es decir, una "metacomunicación". Esta comunicación servirá para definir la relación cuando la comunicación haya sido confusa o ambivalente

En la comunicación humana es posible referirse a los objetos de dos maneras totalmente distintas. Se los puede representar por un símil, tal como un dibujo, o bien mediante un nombre. Estos dos tipos de comunicación, uno mediante una semejanza autoexplicativa y, el otro, mediante una palabra, son equivalentes a los conceptos analógicos y digitales.

En la comunicación digital, la palabra es una convención semántica del. Lenguaje; no existe correlación entre la palabra y la cosa que representa, con la posible excepción de las palabrasOnomatopéyicas. Como señalan BATESON y JACKSON: "No hay nada" parecido a cinco en el número cinco; no hay nada particularmente "similar a mesa" en la palabra mesa. Por otro lado, en la comunicación analógica hay algo particularmente "similar a la cosa" en lo que se utiliza para expresaría.

La comunicación analógica tiene sus raíces en períodos mucho más arcaicos la evolución y, por tanto, encierra una validez mucho más general que el modo digital de la comunicación verbal, relativamente reciente y mucho más abstracto. La comunicación analógica coincidiría con la comunicación no verbal, entendiendo por comunicación no verbal: los movimientos corporales (kinesia), la postura, los gestos, la expresión facial, el ritmo, la cadencia de las palabras, el silencio y los indicadores comunicacionales que aparecen en el contexto.

El ser humano se comunica de manera digital y analógica. De hecho, la mayoría de los logros civilizados resultarían impensables sin el desarrollo de un lenguaje digital. Ello asume particular importancia en lo que se refiere a compartir información acerca de los objetos. Sin embargo, existe un vasto campo donde utilizamos en forma casi exclusiva la comunicación analógica, se trata del área de la relación. Así pues, el aspecto relativo al "nivel de contenido en la comunicación se transmite en forma digital, mientras que el "nivel relativo a la relación" es de naturaleza predominantemente analógica.

En su necesidad de combinar estos dos lenguajes, el hombre, sea como receptor o como emisor, debe traducir constantemente de uno al otro. En la comunicación humana la dificultad inherente a traducir existe en ambos sentidos. No sólo sucede que la traducción del modo digital al analógico implica una gran pérdida de información, sino que lo opuesto también resulta sumamente difícil: hablar acerca de una relación requiere una traducción adecuada del modo analógico de comunicación al modo digital.

Al emisor no sólo le resulta difícil verbalizar sus propias comunicaciones analógicas, sino que, si surge una controversia interpersonal en cuanto al significado de una comunicación analógica particular, es probable que cualquiera de los dos participantes introduzca en el proceso de traducción al modo digital, la clase de digitalización que concuerde con su imagen de la naturaleza de la relación. El hecho de traer un regalo, por ejemplo, constituye sin duda una comunicación analógica. Pero según la "visión" que tenga de su relación con el dador, el receptor puede entenderlo como una demostración de afecto, un soborno, o una restitución.

La psicoterapia se ocupa sin duda de la digitalización correcta y correctivo de lo analógico; de hecho, el éxito o el fracaso de una interpretación depende de la capacidad del terapeuta para traducir un modo al otro y de la disposición del paciente para cambiar su propia digitalización por otra más adecuada y menos angustiante.

En la comunicación patológica observaremos incongruencias entre lo digital y lo analógico. Una persona puede estar diciendo (digital). No estoy enfadado", y sin embargo, su tono de voz, su expresión facial y sus gestos expresan auténtica agresividad (analógico).

13.3- Interacción simétrica y complementaria.

Todas las relaciones podríamos agruparlas en dos categorías: o son COMPLEMENTARIAS 0 SIMÉTRICAS. En los adolescentes también manifestar en su manera de expresar, de vestir y de comer.

En el primer caso, la conducta de uno de los participantes complementa la del otro; en el segundo caso, los participantes tienden a igualar especialmente su conducta recíproca. Son relaciones basadas en la diferencia (complementarias), o en la igualdad (simétricas).

En una relación complementaria hay dos posiciones distintas. Un participante ocupa lo que se ha descrito de diversas maneras como la posición superior o primaria mientras el otro ocupa la posición correspondiente inferior o secundaria. Estos términos son de igual utilidad en tanto no se los identifique con "bueno" o "malo", "fuerte" o "débil". Una relación complementaria puede estar establecida por el contexto social o cultural (como en los casos de madre e hijo, médico y paciente, maestro y alumno), o ser el estilo idiosincrásico de relación de una díada particular. En cualquiera de los dos casos, es importante destacar el carácter de mutuo encaje de la relación en la que ambas conductas, disímiles pero interrelacionadas, tienden cada una a favorecer a la otra. Ninguno de los participantes impone al otro una relación complementaria, sino que cada uno de ellos se comporta de una manera que presupone la conducta del otro, al mismo tiempo que ofrece motivos para ella: sus definiciones de la relación encajan.

En una relación simétrica no existen dos posiciones ya que está basada en la igualdad. La relación simétrica puede estar definida por el contexto social, como por ejemplo, la relación entre hermanos, entre amigos, entre marido y mujer, etc. También puede ser el estilo propio de una díada particular.

En la relación simétrica existe el peligro de la competencia o rivalidad. Cuando se pierde la estabilidad en una relación simétrica, se produce una "escapada" de uno de los miembros; el otro intentará equilibrar la relación, produciéndose, a partir de aquí, el fenómeno conocido como "escalada simétrica".

Los conceptos de complementariedad y simetría se refieren simplemente a dos categorías básicas en las que se puede dividir a todos los intercambios comunicacionales. Ambas cumplen funciones importantes y, por lo que se sabe por las relaciones sanas, cabe llegar a la conclusión de que ambas deben estar presentes, aunque en alternancia mutua o actuando en distintas áreas. Ello significa que cada patrón puede estabilizar al otro siempre que se produzca una escapada en uno de ellos; así mismo, es posible y necesario, que los dos participantes se relacionen simétricamente en algunas áreas y de manera complementaria en otras.

13.4 FUNCIÓN Y RELACIÓN: ESENCIA DE LA PERCEPCIÓN.

Los trastornos alimenticios como los demás trastornos tienen criterios que les rigen, tienen signos patognomónicos, la percepción del adolescente puede darlo una sensación y con las percepciones que él tienen, puede genera una emoción y puede caer en problemas emocionales con TCA.

Cuando el vocabulario de la psicología experimental se extendió a los conceptos interpersonales, el lenguaje de la psicología siguió siendo monádico. Conceptos tales como liderazgo, dependencia, extraversión e introversión, y muchos otros, se convirtieron en el objeto de detallados estudios. Desde luego, el peligro consiste en que todos estos términos asuman una pseudorealidad propia si se los piensa y se los repite durante bastantes tiempos y la construcción teórica "liderazgo" se convierte por fin en LIDERAZGO, una cantidad mensurable en la mente humana, concebida como un fenómeno en aislamiento. Una vez que se produce esta cosificación, ya no se reconoce que el término no es más que una expresión que sintetiza una forma particular de relación en curso.

Así pues, la esencia de nuestras percepciones no son "cosas" sino funciones, y éstas no constituyen magnitudes aisladas sino "signos que representan una conexión. Una infinidad de posiciones posibles de carácter similar..." Siendo esto así, no debe sorprendernos que incluso la percepción que el hombre tiene de sí mismo sea, en esencia, una percepción de funciones, de relaciones en las que participa, por mucho que después quiera cosificar esa percepción.

13.5. CIRCULARIDAD DE LAS PAUTAS DE COMUNICACIÓN.

Las pautas de comunicación en el adolescente tienden a ser circular, ya que tiene la costumbre de rodear en sus ideas y sus acciones. Estas mismas pautas pueden repetir en los TCA como variablede comunicación.

En el modelo clásico de la ciencia pura, se considera que la causalidad es lineal. En cualquier situación dada, se nos enseña a entender la "causa" de un efecto" alterando las variables una por una hasta que se aísla el factor que produce el hecho particular. Sin embargo si se trabaja a partir de la premisa de que los aspectos significativos de un sistema sólo pueden comprenderse examinando el sistema como una "totalidad", se hace necesario considerar la etiología desde un punto de vista diferente.

Si bien en las cadenas progresivas lineales de causalidad, tiene sentido hablar acerca del comienzo y el fin de una cadena, tales términos carecen de sentido en los sistemas con circuitos de retroalimentación. En un círculo no hay comienzo ni fin. En el mundo no es posible encontrar el claro y lineal ordenamiento de causa y efecto, a menos que se lo imponga artificialmente. La teoría general de sistemas considera que la causalidad es un proceso circular.

Mientras que en algunos tratamientos, como el psicoanalítico, la curación y el cambio provienen del conocimiento de ciertos sucesos traumáticos de la infancia, la curación y el cambio en la terapia familiar provienen fundamentalmente de examinar cómo opera corrientemente el sistema familiar y de comprender la función que los problemas desempeñan en los procesos orientados hacia un objetivo, presentes en la existencia ordinaria del sistema. Teóricamente, el concepto de causalidad lineal implica que la línea etiológica se desplaza del pasado hacia el presente, y de este hecho proviene la necesidad de retroceder hasta el comienzo de la sucesión de los hechos para poder comprenderlos; cuando se utiliza el concepto de causalidad circular, se enfatiza el "aquí y ahora", porque es aquí y ahora cuando todo el círculo puede verse operando. Como una escalera en espiral, el presente vuelve a actuar el pasado de modo tal que el significado debe buscarse dentro de los límites de los procesos actuales del sistema. El pasado se transforma en redundante, y el punto de partida del terapeuta familiar pasa a ser la ecología antes que la génesis.

El factor psicológico respecto a los desórdenes alimenticios tanto en investigación como en la actividad terapéutica ha estado influida por la tradición intelectualista en Psicología (Ribes, 2002).

Los diversos modelos teóricos sobre el tema en el plano psicológico tienen en común una característica que regula su estructura teórica y su quehacer práctico, que es la de centrar sus explicaciones en la determinación de factores causales de índole interna conceptualmente confusos.

Cuando se habla de desórdenes alimenticios se hace referencia a la problemática alimentaria en un amplio espectro que abarca problemas relacionados con sobre peso como con infrapeso, que se definen como un patrón de conducta anormal respecto a la ingesta de alimentos y el balance energético (Schlundt& Johnson, 1990).

El término conducta alimentaria de riesgo se refiere a los hábitos alimenticios que pueden desencadenar desordenes relacionados con el infrapeso (anorexia y bulimia).

La estructura contextual del presente estudio se centra en el modelo ecológico de Bronfenbrenner el cual se fundamenta en la teoría de campo gestáltica de Lewin. Esta postura ecológica, enfatiza que las interacciones y acomodaciones entre la persona en desarrollo y su ambiente, explican cómo los acontecimientos en diferentes contextos afectan la conducta humana directa o indirectamente (Martos, 2005).

Aún y cuando este modelo retoma el carácter fenomenológico reduccionista de la Psicología topológica. Se rescata el análisis sistémico contextual (círculos concéntricos) mismo que está exento de toda explicación fenomenológica.

Este modelo explicativo psicosocial contempla que la adolescencia (etapa en donde se presentan y desarrollan los desórdenes alimenticios) es un producto contextual, la cual es construida a partir de materiales e interacciones de un contexto que define el marco de sus posibilidades y oportunidades.Entendiendo este contexto como una multiplicidad de contextos como el cultural, familiar, escolar, comunitario y legal (Jiménez, 2006).

El planteamiento meta teórico de las variables personales se fundamenta en la perspectiva de campo interconductual la cual supone el abandono de la noción de que lo psicológico y/o sus supuestos procesos (emoción, aprendizaje, percepción etc.) sean algo que le sucede a un organismo o que sucede en el organismo; en vez de esto, se considera que cualquier cambio conductual es un cambio en el campo total (Kantor, 1971).

Esta concepción de campo interconductual de las variables psicológicas da sentido al concepto de variables psicosociales que se emplea en esta investigación. Se asume que la perspectiva de campo interconductual tiene una concordancia lógica con la estructura contextual de Bronfenbrenner y con los conceptos psicosociales de Musitu. Sin embargo, es preciso señalar que en el presente trabajo no se contemplan las variables psicosociales como eventos mediadores de procesos causales de naturaleza interna (psíquicos o cognitivos). Si bien no se adopta la estructura conceptual de la Teoría de la Conducta, las variables psicosociales son contempladas como eventos prístinos (Kantor, 1971).

Resumiendo, el marco teórico-conceptual que fundamenta esta investigación, integra la estructura contextual de Bronfenbrenner y la identificación de factores de riesgo y protección del modelo de Musitu, bajo una concepción de campo interconductual.

13.6 Sistemas de Actividad y Comunicación en la Adolescencia

El sistema de actividad y de comunicación del adolescente es muy complejo ya que tiene muchos adaptadores que les permite habla entre ellos, en los casos de TCA, la comunicación es el reflejo.

En cuanto a la actividad formal o institucionalizada tenemos que el adolescente continúa asistiendo con carácter obligatorio a las instituciones de la Enseñanza Media, cuestión que resulta semejante a lo que sucede al niño escolar, como característica en esta esfera.

Sin embargo, en la Adolescencia la actividad de estudio cambia tanto por su contenido como por su forma e impone al adolescente la necesidad de utilizar nuevos métodos de asimilación de los conocimientos, proceso que se torna más complejo en la edad juvenil.

En esta etapa, las variaciones que se producen en el contenido y los métodos de obtención del conocimiento, influirán notablemente en el desarrollo de la personalidad y, de forma especial, en el desarrollo del pensamiento, de los intereses cognoscitivos y profesionales.

Pasando a analizar la actividad informal o no institucionalizada, vemos que los adolescentes desarrollan diversas actividades en su tiempo libre de manera mucho más intencional que en la edad escolar, en cuanto a sus posibilidades de elección; es decir, hay mayor selectividad en la elección, en función de sus intereses generales. Alguna de estas actividades puede ser altamente motivante para el adolescente y relegar las actividades vinculadas a la escuela a un segundo plano. También pueden encontrase o no vinculadas con la profesión a la que piensan dedicarse en el futuro.

Al analizar el sistema de comunicación en la adolescencia podemos afirmar, primeramente, que esta etapa es considerada como un período crítico del desarrollo y una de las principales razones en que se sustenta esta valoración es la presencia de contradicciones entre adolescentes y adultos, que resultan prácticamente inevitables.

En sus relaciones con los adultos los adolescentes desarrollan una mayor criticidad en la valoración de estas figuras, en comparación con la etapa precedente, tanto en torno a los maestros como a sus padres, quienes dejan de ser autoridades sagradas. No obstante, por el carácter dicotómico del pensamiento, así como por la insuficiente consolidación de algunas formaciones motivacionales, esta valoración es poco reflexiva y también tiende a ser rígida.

En el caso de los maestros, la aceptación del adolescente va a depender en mayor medida de su estilo de comunicación, que de la preparación técnica, entendida como excelencia académica en la materia o materias que imparte. Los adolescentes privilegian a aquellos profesores que establecen con ellos un diálogo abierto y se preocupan por sus inquietudes e intereses, relacionados con la vida en general, y no únicamente con la esfera de los estudios.

En cuanto a las relaciones de comunicación entre los adolescentes y sus padres vemos que las mismas dependen de diferentes factores. Entre estos se encuentran el nivel socio-económico, escolar y cultural de la familia y el estilo de comunicación que se ha venido desarrollando entre padres e hijos en las etapas anteriores. Si existe costumbre de dialogar en la familia, si se colegian las decisiones, si se respeta la diversidad de las individualidades y el derecho a la independencia de los hijos, el tránsito por esta etapa será menos convulso en las relaciones adulto-adolescentes.

El conflicto adulto- tiene como principal causa la divergencia de opiniones de adultos y adolescentes, en cuanto a los derechos y deberes de estos últimos(adolescente, Petrovsky, 1980).

Es muy típico ver cómo los padres exigen al adolescente que cumpla deberes como son el ser un buen estudiante, cooperar en la realización de las tareas del hogar, ser responsable, disciplinado, respetuoso con los adultos, etc. Sin embargo, cuando el adolescente haciendo uso de sus derechos, y una vez cumplidos sus deberes, pide a sus padres que le permitan salir con sus amigos, ir a la playa, a una fiesta, al campismo etc., no son pocos los padres que sin dar razones le niegan esta posibilidad.

El conflicto adulto-adolescente se encuentra condicionado por factores objetivos y subjetivos, ya que el adolescente ocupa una posición social intermedia, continúa dependiendo económicamente de los padres, aún asiste a una institución escolar con vistas a lograr la preparación necesaria para su futuro desempeño profesional y muestra en ocasiones conductas infantiles o rasgos de inmadurez.

Este conflicto es más agudo al inicio de la adolescencia y tiende a disminuir a finales de ella. El carácter más o menos agudo del mismo, depende de la capacidad o incapacidad de los adultos, y en particular de los padres, para dejar a un lado la moral de obediencia -propia de las relaciones con sus hijos en etapas anteriores- y establecer un diálogo abierto y una actitud de entendimiento mutuo.

Es por ello, que para lograr atenuar este fenómeno o solucionarlo, una de las principales vías consiste en producir cambios en el estilo de comunicación con el adolescente, de forma tal que el adulto combine una dirección firme y consecuente con la flexibilidad necesaria y la racionalidad de las exigencias. Los adultos deben explicar a los adolescentes el motivo de sus exigencias, provocar reflexiones mutuas y aplicar la fuerza de su poder sólo cuando resulte imprescindible.

Una vez analizado en qué consiste el conflicto adulto-adolescente, las causas que lo condicionan y lo agudizan, así como las vías que favorecen su solución, pasamos a caracterizar la llamada crisis de la adolescencia.

El análisis e interpretación de la crisis de la adolescencia en la Psicología se encuentra estrechamente relacionado con la concepción que se sustente sobre los determinantes del desarrollo psicológico y su periodización, cuestiones tratadas en la primera parte de este libro.

Para los autores que poseen una concepción biogenética o biológica este fenómeno depende de la maduración del organismo y se asocia, de manera necesaria, a las transformaciones puberales. De acuerdo con este punto de vista la crisis transcurre de manera similar e inevitable en todos los casos, al estar determinada por factores biológicos, siendo calificada esta concepción como la del universalismo biogenético.

Las concepciones sociogenéticas o sociologistas abogan por conceder el papel determinante, en la aparición de la crisis de la adolescencia, a las influencias externas y,muy especialmente, a la «posición intermedia» que ocupa el adolescente, al ser considerado, desde lo social, como alguien que dejó de ser un niño pero tampoco es aún un adulto.

Como expresábamos al analizar las características del desarrollo en la edad escolar, el sistema de comunicación no se agota en las relaciones con los adultos, sino que incluye, de forma especialmente relevante en esta edad, las relaciones con los coetáneos o iguales.

En la adolescencia los sujetos pasan más tiempo con sus compañeros que en el seno familiar, por lo que sus valores y normas de conducta están determinados, en buena medida, por el carácter de estas relaciones, tanto en el grupo formal como en el espontáneo o informal.

La necesidad de ocupar el lugar deseado o lugar al que aspira en su grupo de coetáneos, desempeña un importante papel en el desarrollo armonioso de la personalidad en esta etapa, ya que el equilibrio y bienestar emocional del adolescente, dependerá de que logre ocupar el lugar deseado entre sus iguales este lugar y de la aceptación que alcance dentro del grupo. Recuérdese que L. I. Bozhovich (1976) señala cómo a partir del 4to grado el ser aceptado por el grupo se convierte en motivo fundamental de la conducta del niño. Esta autora explica diferentes fenómenos del comportamiento de los adolescentes como son el conformismo y el negativismo, los cuales concibe como indicadores de la trascendencia que tiene para ellos el hecho de ser aceptados por su grupo de iguales.

El conformismo se trata de que en determinadas circunstancias, el adolescente se pliega a la opinión de la mayoría del grupo, sin mostrar resistencia alguna aunque no la comparta o no esté convencido de ella, en busca de aprobación social. Como conducta contraria a estas actitudes conformistas aparece el negativismo, que consiste en la oposición sistemática a los puntos de vista de los otros, sin suficiente fundamento, algo así como la posición del «rebelde sin causa».

Ambas conductas reflejan el insuficiente desarrollo de un sistema interno de motivación, pues en el primer caso se aceptan las normas de forma poco crítica, y en el segundo, se rechazan sin hacer razonamientos al respecto.

Otra conducta interesante que también nos indica la importancia que confiere el adolescente a la aceptación grupal es la llamada»persecución de la nota». Muchos adolescentes se empeñan en obtener altas calificaciones en la escuela, aun cuando éstas no sean resultado de su preparación académica ni de sus conocimientos, como medio de obtener prestigio entre sus compañeros de clase. Esta necesidad conduce en ocasiones al fraude académico.

La ausencia del reconocimiento deseado por parte de sus iguales, puede llevar al adolescente a convertirse también en el peor alumno de su aula y por este camino a conductas antisociales que pueden desembocar en la comisión de actos delictivos. Investigaciones realizadas por M. A. Alemanski y G. G. Bochkarieva (citados por I. Kon, 1990) así lo demuestran.

La amistad constituye otra importante esfera en el sistema de comunicación durante la adolescencia. Esta relación se basa en la confianza total, la ayuda y el respeto mutuo. En la adolescencia se produce una tendencia a idealizar al amigo y la amistad puede romperse con relativa facilidad. Este hecho está en consonancia con el desarrollo intelectual, porque el pensamiento, como posteriormente veremos, tiende a ser dicotómico y poco flexible.

En cuanto a las diferencias de género, las mujeres sienten más tempranamente la necesidad de una amistad, como relación íntima y profunda, de marcado matiz emocional y acerca de la misma poseen criterios más elaborados que los varones. En el caso de estos últimos, se considera que las relaciones de amistad presentan, generalmente, una función más utilitaria.

En el transcurso de la adolescencia la aparición de la relación de la pareja comienza a relegar las relaciones de amistad a un segundo plano. Las relaciones de pareja en esta etapa, en sentido general son inestables, ya que poseen un carácter experimental y contribuyen al desarrollo de la autovaloración o identidad personal y, en particular, de la identidad sexual y de género del adolescente. Esto resulta peligroso, pues los adolescentes en muchos casos no cuentan con una adecuada educación sexual, por lo que constituyen un grupo de riesgo, por excelencia, para contraer enfermedades de trasmisión sexual, y también pueden llegar a una maternidad o paternidad precoz, para la que no están ni objetiva ni subjetivamente preparados.

En la elección de la pareja los adolescentes tienen dificultades para hacer coincidir su ideal desde el punto de vista físico con el ideal al que aspiran de acuerdo a sus cualidades psicológicas y morales, por la gran importancia que confieren a la imagen corporal.

La «situación social del desarrollo», propia de la etapa de la adolescencia, en la cual hemos analizado hasta aquí los cambios biológicos y su repercusión psicológica, así como las cuestiones relativas a la caracterización de los sistemas de actividades y comunicación permite, a partir de la interacción entre los aspectos internos y externos que la conforman, explicar el surgimiento de las nuevas particularidades psicológicas propias de estos períodos.

Estas particularidades, como hemos señalado con anterioridad, se presentan siguiendo algunas tendencias generales, aun cuando se expresen de manera singular e irrepetible en cada sujeto concreto, matizadas por las condiciones socio-históricas en que se transcurre su vida.

Capítulo III

14.-Modelo teóricos de los desórdenes alimenticios

14.1. -Modelos estructurales de los desórdenes alimenticios

Después de varios estudios hechos de diferentes corrientes y modelos psicológicos, hay muchas teorías que surgen sobre los desórdenes alimenticios, cada una de esta teoría con una base, una finalidad, una orientación y con una epistemología.

El término modelo ha sido ampliamente utilizado como herramienta conceptual en la investigación social, sin embargo su carácter polisémico ha ocasionado confusión por lo que es preciso delimitar y clarificar el concepto así como su relación con la teoría (Callejo, 2000).

Un modelo es la representación de un determinado fenómeno en el que todos sus elementos conceptuales han sido operacionalizados y expresados en una relación causal entre ellos, la cual ha sido validada por una teoría. Desde esta perspectiva se considera al modelo como una especificación de la teoría que ofrece una explicación observable de los elementos que integran el fenómeno estudiado.

A continuación se abordan brevemente los modelos teóricos más representativos de los desórdenes alimenticios.

14.2La perspectiva de campo en Psicología

La ciencia es un modo de conocimiento que ha tenido a través de la historia una serie de modificaciones en sus parámetros axiológicos los cuales han sido influidos por la red de creencias y valores de cada época (Ribes, 1997).

El conocimiento científico contemporáneo ha tenido una serie de transformaciones como corolario de la denominada revolución científica que implica la transición del metaparadigma newtoniano-cartesiano de la explicación causa-efecto al metaparadigma constructivista de la multifactorialidad.Esta revolución ha traído consigo una serie de confusiones epistemológicas y teórico-conceptuales en diferentes áreas del conocimiento entre las cuales tenemos que destacar a la Psicología.

Este periodo de transición meta paradigmática de la ciencia (Kuhn, 2006) ha afectado particularmente a nuestra disciplina debido a que esta, se encuentra en un estado pre-paradigmático en donde no se ha podido establecer un objeto de estudio consensuado (Ribes, 2000) lo cual cancela posibles conciliaciones teóricas y/o metodológicas de las distintas posturas en Psicología (Benevides & Werner 2002). Por lo que el conceptualizar a la Psicología como una ciencia multiparadigmática resultaría un planteamiento espurio.

Tomando en consideración lo anteriormente señalado, resulta necesario establecer las bases epistemológicas y metateóricas que sustentan una explicación que se jacte de ser científica con la finalidad de no caer en hibridaciones conceptuales eclécticas que lejos de integrar teorías solo propician confusión conceptual.

Un análisis histórico - conceptual de nuestra disciplina permite esclarecer los principios y concepciones de las diversas líneas teóricas con la finalidad de establecer parámetros que nos permitan ubicar las aproximaciones teóricas contemporáneas como auténticas integraciones o como simples ensaladas conceptuales.

A este respecto, Kantor (1969) señala que el progreso de la ciencia ha pasado por tres etapas:

1) la etapa de la propiedad sustancia

2) la etapa de la correlación estadística

3) la etapa del campo integrado.

La ejemplificación de estas etapas en el desarrollo de la Psicología se explica, en la primera etapa de propiedad-sustancia con la concepción de una entidad o serie de entidades internas extra espaciales que constituidas en cosas, atributos o estados (alma, mente, cognición) son representados como centros de procesos causales (Ryle, 2005).

La segunda etapa gira en torno a fórmulas estadísticas que pretenden analizar empíricamente la interacción entre dos mundos; el mundo de la mente (extra espacial) y el mundo físico de sus expresiones (espacial). Finalmente la construcción del campo integrado tiene que ver con la interacción de un individuo con objetos estimulantes, en condiciones inmediatas precisas y sobre la base de contactos previos del organismo y los objetos estimulantes.

El modelo de campo en Psicología se apoya en la experiencia de disciplinas como la astronomía y la física, las cuales se fundamentan en que la noción de estructura ofrece una representación más adecuada de los fenómenos propios.

14.3.Teoría de Campo de la Gestalt

Considerado el padre de la psicología social, Kurt Lewin inspirado en los estudios perceptivos de la Gestalt que disocian figura y fondo, considera que el comportamiento humano es consecuencia del conjunto de las circunstancias ambientales. Más que su pasado o las previsiones de futuro, es el entorno personal el que define y describe la proyección social del individuo.

Lewin en 1978, señala que las características distinguen a una teoría de campo:

1) El empleo de un método constructivo más que clasificatorio - Que implica cambiar de una agrupación de eventos, objetos y personas según sus similitudes conceptualizados como elementos de abstracción producto de la experiencia, a uno constructivo en donde la agrupación sea determinada por relaciones vistas como elementos de construcción producto de la teoría científica.

2) El interés en los aspectos dinámicos de los hechos. En donde se concibe al comportamiento es fruto de la interacción de los individuos y grupos en un espacio y en un momento dado y el sujeto es concebido como un sistema que mantiene un equilibrio dinámico con el ambiente.

3) Un enfoque psicológico antes que físico - Esto implica que el campo que influye sobre un individuo no se suscriba en términos fisicalistas objetivos, sino de la manera en que éste existe para la persona en ese momento. Describir objetivamente una situación en Psicología significa en realidad describir la situación como una totalidad de aquellos hechos, y solo de aquellos, que configuran el campo de ese individuo.

4) Un análisis que parte de la situación global. La teoría de campo critica a las teorías fisicalistas por la ausencia de un análisis psicológico profundo. El procedimiento analítico de la teoría de campo tiene como norma caracterizar la situación en su totalidad.

5) La distinción entre problemas sistemáticos e históricos. Los eventos se explican en términos de las propiedades del campo que existen en el momento en que ocurre por lo tanto la teoría de campo es a histórica y considera que la influencia de los eventos pasados es indirecta.

6) La representación matemática del campo. La Psicología debe usar un lenguaje estricto y que concuerde con los métodos asimétricos para permitir derivaciones científicas. Aun cuando Lewin considera a la Psicología como una ciencia cualitativa, acepta el uso de la estadística, incluso considera que ciertos tipos de geometría como la topología son muy útiles para representar la estructura de situaciones psicológicas.

La Psicología de campo gestaltista aun y cuando rebasa la simple concepción holística de sus antecesores (Brentano & Stumpf) plantea una estructura general de los eventos, abriendo la posibilidad de auténticas descripciones de campo. Sin embargo, Kantor en 1969 señala una serie de características que no le permiten a la postura gestáltica ocuparse de campos auténticos.

1) Su concepción dualista La Psicología topológica y la teoría de la Gestalt en general hacen referencia a abstracciones internalistas y a condiciones medioambientales centrando sus explicaciones en las descripciones y/o propiedades de estos dos mundos en lugar de ocuparse del campo total.

2) Su carácter fenomenológico - El cual puede distinguirse claramente en su concepción del ambiente, el cual es visto no como es, sino como es experimentado y en donde la conducta no surge de las propiedades objetivas del mundo de los estímulos sino de un mundo transformado en un mundo interior. Por lo que la interpretación de conceptos como el de espacio conductual de Koffka resulta imposible de interpretar salvo como una concepción meramente metafísica.

3) Su concepción internalista - El conceptualizar entidades y/o atributos tales como conciencia, cognición entre otras, se aborda aquello que acontece en el individuo. Por lo que sus principios explicativos se refieren a lo interno y no al campo.

4) Su explicación isomorfica - En lugar de abordar directamente los fenómenos psíquicos adopta una explicación isomorfica al analizarlos como sistemas de interrelaciones neuro-fisiológicas.

5) Su carácter simbólico - Al ser la teoría de campo gestáltica una simple imitación de los sistemas físicos y matemáticos se convierte en una teoría de meras estructuras simbólicas formales y analógicas, con poco o ningún valor descriptivo o interpretativo para los eventos psicológicos.

6) Su carácter preanalítico - Al centrar sus explicaciones en entidades o atributos internos comete el error de abordar las interrelaciones objetivas de los factores solo en nivel de los datos burdos o preanalítico.

14.4Teoría de Campo Interconductual

La historia y el desarrollo de la Psicología conductista ha estado marcada por una serie de imágenes erróneas algunas de las cuales han sido aclaradas por Belanger (2001) en su libro Images et realites du behaviorisme. Marino Pérez en el prólogo de la reedición en español de la obra, señala que la primera imagen a aclarar es la noticia de su fallecimiento y menciona que en los albores del siglo XXI resulta irónico que después de tanta revolución cognitiva, el conductismo lejos de desaparecer se ha desarrollado en diversas líneas teóricas.

Otra imagen falaz sobre el conductismo es su supuesto desarrollo hacia hibridaciones eclécticas dualistas (cognitivo-conductuales) las cuales son solo una degeneración cognitivista y no una evolución.

Otro aspecto relevante es el hecho de que Kantor formula un sistema descriptivo y explicativo sincrónico al poner de relieve el concepto de interdependencia en campos de relaciones, a diferencia del esquema causal clásico el cual es lógicamente diacrónico. Contrario a las posturas teóricas clásicas (incluyendo algunas conductistas), la propuesta de Kantor no destaca como objeto de análisis a ciertas formas funcionales de actividad del organismo, sino que pone de relieve la interacción misma entre el organismo y el ambiente como centro de interés teórico (Ribes, & López, 1985).

Kantor (1969) señala que la esencia de una construcción de campo es aquella en la que todos los eventos deben considerarse como interacciones complejas de numerosos factores en situaciones específicas, por lo que toda explicación de una teoría de campo necesariamente tendrá como primer condición el suplir las concepciones en términos de principios y propiedades de los objetos o eventos, ya sea que estén localizadas dentro de los objetos o eventos sujetos a observación o en alguna condición o cosa externa a ellos.

La teoría de campo interconductual especifica los detalles funcionales de la acción en lugar de apoyarse en una abstracción explicativa general, no propone causas internas tales como la mente, procesadores de información o pulsiones (mentalismo) tampoco proponen causas externas ubicadas en las condiciones medioambientales (conductismo Skinneriano) pues esta postura no asume la tradicional teoría de los dos mundos (Ryle, 1975), por lo que se argumenta que no existe lugar en el campo integrado para tales abstracciones, pues ninguna de ellas son necesarias o siquiera útiles dentro del sistema.

De tal forma que, una autentica teoría de campo exige la exclusión de principios psíquicos e internos. Así, la construcción del campo psicológico se debe derivar de la conducta real de los organismos con objetos y eventos en condiciones específicas. A diferencia del conductismo Watsoniano y Skinneriano que si bien rechazan la explicación dualista del psiquismo (mente-cuerpo) aún conservan los aspectos físicos del dualismo (interno-externo), la postura interconductual comienza y termina su trabajo en el estudio de eventos prístinos (Kantor, 1980), sin complicarse con construcciones lingüísticas propias de la tradición intelectualista en Psicología.

Cuando las relaciones funcionales específicas de los factores del campo han sido descritas, se completa la actividad científica justo como se hace en la descripción de cualquier otro evento en la naturaleza. Esta descripción de los componentes de un evento natural en términos estrictamente observacionales es la vía por la cual la Psicología científica debe proceder. (Smith & Smith, 1996).

14.5-El modelo Psicoanalítico

El psicoanálisis; como la primera fuerza dela psicología preconiza varios problemas psíquicas como la neurosis alimentaria causado por el abandono. Cual es realmente los trasfondos de los desórdenes alimenticios según el modelo psicoanalítico.

El modelo psicoanalítico de los desórdenes alimenticios se expresa en el manuscrito G de 1895 sobre la melancolía sostiene que la neurosis alimentaria paralela a la melancolía es la anorexia argumentando que la tan conocida anorexia nerviosa de las adolescentes parece representar, tras detenida observación, una melancolía en presencia de una sexualidad rudimentaria. Sin embargo, así como surge esta pseudo-explicación intelectualista al más puro estilo literario freudiano, existen múltiples interpretaciones mágicas de corte psicoanalítico que a lo largo de la historia se han ido cobijando a la sombra del cuadro de moda del momento, melancolía, psicosis, histeria, etc. (Almenara,2003) sin que hasta ahora puedan aportar elementos pertinentes en el plano descriptivo, predictivo y de intervención sobre los desórdenes alimenticios. Un claro ejemplo de estas variaciones psicoanalíticas lo representa la perspectiva transpersonal Jungiana en donde la anorexia podría ser entonces un camino hacia la individuación en el que la mujer se reúne con la Madre y recupera para sí el significado que tiene para ella su existencia femenina (Araya, 2001).

Durante la década de los setentas surgen las posturas neo psicoanalíticas que destacan el papel preponderante de las alteraciones de la Imagen Corporal (IC) en los denominados Trastornos de Conducta Alimentaria (TCA). La Dra. Hilde Bruch de orientación neo Freudiana aun y cuando parte de que el psicoanálisis tradicional, con su énfasis en la interpretación de procesos inconscientes es bastante ineficaz atribuye las alteraciones de la IC a un déficit del yo, en lo que se refiere a autonomía y dominio del propio cuerpo, que da lugar a un sentido de ineficacia personal (Bruch, 1982).

Para HildeBruch (1973) la distorsión de la imagen corporal así como las disfunciones alimentarias tiene un carácter simbólico considerándolos como formas de camuflaje de diversos problemas que por otros medios no ha sido posible resolver. Ella menciona una serie de características que distinguen el síndrome de anorexia nerviosa: una persecución implacable por la delgadez; una preocupación casi delirante por la imagen corporal; una incapacidad para identificar el hambre con otros estados de tensión corporal; falta de identidad y un sentido de ineficacia paralizador.

Desde entonces, se considera un criterio diagnóstico de Anorexia y Bulimia a la alteración de la imagen corporal. Otra herencia de la postura Psicopatológica de los TCA es su relación con trastornos de personalidad, especialmente asociado a rasgos obsesivos, histéricos y compulsivos (González, Unikel, Cruz & Caballero, 2003).

Para el Psicoanálisis en cualquiera de sus acepciones, la explicación de los desordenes alimenticios tienen una base psicopatológica en la que no se constituyen conceptualmente con una nosología propia, sino que es una forma sintomática de otra estructura clínica llámese neurosis, perversión o psicosis (López, 1999).

14.6- Modelos Cognitivo-Afectivos

La cognición y la afectividad son dos aspectos importantes de la personalidad del adolescente; ya que de igual manera puede impactar en las conductas del adolescente para que sufren, que parecen o ha sido diagnosticado de TCA:

En el abordaje de los Trastornos de Conducta Alimentaria (TCA) se considera a la alteración de la Imagen Corporal como el factor psicológico determinante tanto en la etiología como en el diagnóstico de estos desórdenes alimenticios.

Una alteración de la imagen corporal (insatisfacción corporal) se ha considerado clave dentro de los posibles factores predisponentes, y otra alteración (distorsiones perceptivas del tamaño corporal) como un criterio diagnóstico Así, tenemos que esta aproximación teórica considera que las alteraciones de la imagen corporal incluyen una distorsión perceptiva de la talla que conlleva una sobreestimación de partes del cuerpo y una alteración cognitivo-afectiva asociada a la insatisfacción y preocupación por la figura, contemplando de igual forma que ambas alteraciones se encuentran estrechamente relacionadas (Garner&Garfinkel, 1981).

Se han encontrado una relación directa y significativa entre insatisfacción de imagen corporal y conducta alimentaria de riesgo sin embargo, también se han reportado hallazgos contradictorios respecto a la relación que guardan estas variables. (Sánchez-Sosa, 2007; Ballester, de Gracia, Patiño, Suñol, & Ferrer, 2002; Benedito, Perpiñá, Botella, & Baños, 2003; Espina, Ortego, Ochoa, Alemán &Juaniz, 2001 Johnson &Wardle, 2005),

 James E.Johnson, Francis Wardle analizaron los efectos de diversos factores respecto a los desórdenes alimenticios encontrando que las correlaciones simples confirman la expectativa que los niveles más altos de insatisfacción corporal y restricción alimentaria están asociados con los niveles de ingesta alimenticia anormal y bajo peso, sintomatología bulímica, depresión, baja autoestima, y estrés.

Al utilizar una regresión logística múltiple para examinar la capacidad predictiva de las variables, se determinó que tanto las dietas restrictivas como la insatisfacción de imagen corporal aparecían como los factores que mejor predecían la ingesta alimenticia anormal y el infrapeso.

14.7 -Modelos Multideterminados

El adolescente tiene que integra todo para lograr una homeostasis en su ámbito bio-psico-social. Hay muchos factores que determinan la conducta alimenticia. Los TCA son como la punta del Iceberg; es como un reflejo de todo lo que vive el adolescente en su ámbito familiar, escolar, social y de pareja.

El carácter multifactorial de las modernas explicaciones en ciencia ha conducido a replantear el abordaje de la conducta alimentaria y por ende encaminar los esfuerzos hacia la búsqueda de nuevos modelos explicativos acordes con la perspectiva holística de la ciencia.

Figura 1. Modelos multideterminados

14.8Modelos Multideterminados

14.8.1-Modelo Multidimensional de la Anorexia

El adolescente es multidimensional por ende todas sus ideas, sus acciones y sus trastornos tienen una etiología multidimensional.

Un intento por encontrar una explicación holística de los desórdenes alimenticios se observa en el modelo multidimensional de la anorexia de Toro y Vilardell (1987) quienes consideran la interacción de factores predisponentes, precipitantes y de mantenimiento:

Factores Predisponentes

Factores Precipitantes

Factores Perpetuantes

Factores genéticos, Edad 13-20 años, Sexo femenino, Trastorno afectivo, Introversión/inestabilidad, Sobrepeso en la pubertad y adolescencia, Nivel social medio/alto, Familiares con trastorno afectivo, Familiares con adicciones, Familiares con trastornos de la ingesta, Obesidad materna, Valores estéticos dominantes.

Cambios corporales, Separaciones y pérdidas, rupturas conyugales del padre, Contactos sexuales, Incremento rápido de peso, Críticas sobre el cuerpo, Enfermedad adelgazante, Traumatismo desfigurador, Incremento en la actividad física, Acontecimientos vitales.

Consecuencias de la inanición, interacción familiar, aislamiento social, cogniciones anoréxicas, actividad física excesiva, iatrogenia

Tabla 4. Factores predisponentes, precipitantes y de mantenimiento

Este modelo, aunque contempla diversos factores, no establece una integración teórica de los mismos, muy probablemente porque parten de un modelo medico en el que el factor biológico es considerado como el determinante principal e inclusive el factor psicológico también es contemplado desde una perspectiva psiquiátrica pues se sigue conceptualizando como una psicopatología.

14.8.2Modelos Ecológicos

No se puede disociar el adolescente de su medio, de hecho somos producto del medio. A veces los TCA se generan por el medio en lo cual el adolescente vive.

Por otra parte, se han desarrollado modelos explicativos basados en modelos ecológicos que consideran que en el comportamiento alimentario de una persona inciden diversos factores culturales, sociales, económicos y políticos por lo que este no puede reducirse a aspectos meramente biológicos y psicológicos internalistas (Stephen, 2006). Estos modelos establecen que los seres humanos evolucionan y se desarrollan en un constante ir y venir de similitudes y diferencias que se derivan de su potencial genético, su nicho ecológico, su herencia cultural y su historia conductual (Díaz-Guerrero,1972).

Contreras (2002) ha desarrollado una línea de investigación relacionada con la práctica alimentaria y la cultura conceptualizando a la alimentación, como un hecho complejo y diverso que puede ser descrito como un fenómeno multidimensional en el que interactúan la biología y las respuestas adaptativas desarrolladas en cada contexto tomando en cuenta como factores no solo el lugar sino también el tiempo, lo que lo convierte en un fenómeno social, cultural e identitario (Contreras, 2007).

De esta manera el comprender la alimentación implica contemplar las categorías taxonómicas de los alimentos que cada cultura elabora respectos a los productos alimenticios y a las practicas alimenticias referentes a la producción, distribución y consumo de los alimentos que determinan el comportamiento alimentario.

Según Contreras (2007) la alimentación está pautada por el sistema de creencias y valores existentes en cualquier cultura y momento determinando, estas circunstancias condicionan que alimentos son objeto de aceptación o rechazo en cada situación y para cada tipo de persona esto lleva como consecuencia a la creación de categorías de alimentos como serian saludables y no saludables, convenientes y no convenientes, ordinarios y festivos, buenos y malos, adultos e infantiles e inclusive femeninos y masculinos.

Las investigaciones orientadas hacia la determinación de la influencia cultural en los desórdenes alimenticios deberán de contemplar diversos aspectos de aculturación y/o identificación étnica (White &Grilo, 2005).

Estudios etnográficos han encontrado diferencias transculturales en relación a la forma corporal ideal en donde contrariamente al ideal de delgadez de la cultura occidental en algunas culturas se reporta una asociación positiva entre el prestigio social y la acumulación de grasa ya que esta se relaciona con un mayor acceso a recursos alimenticios lo que refleja mayor potencial económico y social (Swami& Martin, 2006).

La etiología de los problemas alimenticios se debe de contemplar una combinación de factores biológicos (genéticos y neuroquímicos); psicológicos (perfeccionismo, expectativas personales altas, tendencia a complacer las necesidades de los demás y baja autoestima); familiares (padres sobreprotectores, ambiciosos, preocupados por el éxito, rígidos y evitadores de conflictos) y sociales (sobrevaloración de la delgadez en la mujer, junto con estímulos de ingesta de alimentos de alta densidad energética). Marín (2002)

Entre las investigaciones que han abordado un enfoque multifactorial, Villasís-Keever, Pineda-Cruz, Halley-Castillo, Alva-Espinosa (2001) realizaron un estudio para determinar los factores asociados a desnutrición infantil considerando factores asociados entre otros a la funcionalidad y composición de la familia encontrando que a mayor número de miembros en una familia mayor frecuencia de desnutrición.

En un estudio realizado por Zabinsky, Wilfley, Calfas, Winzelberg y Taylor (2004), encontraron efectos secundarios en relación a la autoestima ya que se informó de un aumento en la autoestima del grupo en tratamiento en relación al grupo control, llegando a la conclusión de que las condiciones de salud alimenticia tienen efectos positivos en la autoestima.

14.9-Modelos Estructurales de Desórdenes Alimenticios de Willamson.

James Williamson (1995) probaron un modelo estructural lineal con una muestra de 98 mujeres influencia social para la delgadez, para ansiedad atlética de desempeño, y para la autovaloración de logro atlético, desórdenes alimenticios en atletas universitarios.Utilizando el paquete estadístico Lisrel VII realizaron un análisis de trayectorias mediante la especificación de un modelo que integraba las siguientes variables predictores: la presión de influencia social respecto al ideal de delgadez, la ansiedad del desempeño atlético, la auto apreciación de logro atlético, la insatisfacción de imagen corporal; teniendo como variable dependiente los síntomas de desórdenes alimenticios (Williamson 1995).

Los autores concluyen que la presión social de entrenadores y pares atletas respecto al ideal de delgadez, aunada a la ansiedad sobre el desempeño atlético y la auto-apreciación negativa de logro atlético están asociadas con la insatisfacción de imagen corporal. Encontrando una relación directa entre la preocupación excesiva de la imagen corporal y los síntomas de desórdenes alimenticios.

Figura 2. Variable dependiente los síntomas de desórdenes alimenticios

Modelo Psicosocial de síntomas de desórdenes alimenticios deWilliamson, et al 1995.

Capítulo IV

15-Humanismo y los trastornos alimenticios

15.1Pirámide de Maslow

La pirámide consta de cinco niveles

15.1.1-Primer Nivel: Fisiológico

Se trata del el nivel más básico de la pirámide y hace referencia a las necesidades fisiológicas de los seres humanos, tales como: respirar, beber agua, alimentarse, dormir o tener relaciones sexuales.

Los TCA se reflejan más en este nivel, ya que los alimentos son las manifestaciones directas de estos trastornos como su nombre lo indica. Por lo tanto, los trastornos de conducta alimentaria tiene la base en lo fisiológico como en el pirámide de Maslow.

15.1.2Segundo Nivel: Seguridad

Esta fase surge cuando las necesidades fisiológicas se mantienen equilibradas. Son las necesidades de seguridad y protección, tales como: salud, empleo, ingresos o recursos. Los TCA tienden tener como origen la salud como en los casos de la ortorexia y de la vigorexia como el fin de gozar una buena salud.

Por otro lado, el trabajo, ingresos o recursos piden a veces cierto perfil corporal (estatura, talla y peso) que pueden ser la causa directa de un tca, bulimia y anorexia para adaptar al campo laboral. Además, dentro de las instituciones escolares para evitar el acoso escolar (bullyng).

15.1.3 Tercer Nivel: Afiliación y afecto

Están relacionadas con el desarrollo afectivo del individuo, son las necesidades de asociación, participación y aceptación. El ser humano por naturaleza siente la necesidad de relacionarse, ser parte de una comunidad, de agruparse en familias, con amistades o en organizaciones sociales. Estas necesidades son: la amistad, el compañerismo, el afecto y el amor.

Las personas, en la amistad, el compañerismo, el afecto y amor; a veces son selectivas y ponen como criterio indispensable el perfil corporal, club de flacas o club de gorditas. Para ser aceptado los adolescentes son dispuestos a hacer lo que sea como utilizar laxantes, enemas etc. y pueden ser víctimas de trastornos alimenticios.

15.1.4 Cuarto Nivel: Estima

Según Maslow, existen dos tipos de necesidades de estima, una alta y otra baja. La estima alta contempla la necesidad del respeto a uno mismo, e incluye sentimientos tales como confianza, competencia, independencia y libertad. La estima baja incluye: la necesidad de atención, aprecio, reconocimiento, estatus, dignidad, fama o gloria. Un déficit en este nivel se refleja en una baja autoestima y el complejo de inferioridad.

Por la imagen corporal, los adolescentes pueden sobre valorizarse o desvalorizarse. Los Tca pueden causar por la autoestima alta o baja en el adolescente, ya que pueden tener factores preponderantes latentes,

15.2.5 Quinto Nivel: Auto-realización

Maslow utilizó varios términos para definir este nivel: «Motivación de crecimiento», «Necesidad de ser» y Auto-realización».Son las necesidades más elevadas, y a través de su concreción, se encuentra un sentido a la vida mediante el desarrollo potencial de una actividad. Se llega a ésta cuando todos los niveles anteriores han sido alcanzados y completados, al menos, parcialmente.

A no realizar los sueños, las metas y las ilusiones pueden del adolescente, le puede causar un problema de conducta alimentaria por el nivel de fantasía que creo. Por ejemplo por tener un cuerpo perfecto.

Maslow consideró auto-realizados a un grupo de personajes históricos que estimaba cumplían dichos criterios: Abraham Lincoln, Thomas Jefferson, Mahatma Gandhi, Albert Einstein, Charles Darwin o Newton.

Maslow también aborda de otra forma la problemática de lo que es auto-realización, hablando de las necesidades impulsivas, y comenta lo que se necesitaba para ser feliz: verdad, bondad, belleza, unidad, integridad y trascendencia de los opuestos, vitalidad, singularidad, perfección y necesidad, realización, justicia y orden, simplicidad, riqueza ambiental, fortaleza, sentido lúdico, autosuficiencia, y búsqueda de lo significativo.

Cuando no se colman las necesidades de auto-realización, surgen las meta-patologías, cuya lista es complementaria y tan extensa como la de meta-necesidades. Aflora entonces cierto grado de cinismo, los disgustos, la depresión, la invalidez emocional y la alienación.

15.2Los 3 demonios de la Gestalt y trastornos alimenticios

15.2.1-INTROYECTOS:

Mensajes del exterior que nos hemos tragado «sin masticar» y que hemos hecho nuestros sin diferenciar es introyecto o propio. El problema es cuando el introyecto se opone a mis necesidades actuales emergentes. Es un mensaje y deja de serlo cuando lo experimento. Funcionan como si fueran escancias propias que causan culpa o vergüenza. Obstaculizan la propia experiencia y van contra la tendencia actualizarte y no se ponen a prueba.

Con las creencias familiares que tiene el adolescente de la comida, de buen comer por ejemplo, de comer saludable etc. además tragar las cosas sin masticar en la familia. El adolescente tiene tendencia de descargar su energía reprimido en otras fuentes de energía como la comida. O también a no comer por lo que le enseña en la familia sobre sobrepeso.

15.2.2 ASUNTOS INCONCLUSOS:

Es relacional, tiene que ver con alguien y con una necesidad de dar o recibir que quedó insatisfecha. Se rigidiza la necesidad y el satisfactor. En el adolescente, a veces tiene muchas necesidades insatisfechas que le causan conflictos emocionales, es uno de los factores que pueden ocasionar trastornos alimenticios. Cuando la comunicación entre el adolescente y su entorno esta paradójica también se pueden dar lugar a uno de los TCA. Un impulso agresivo en la relación con la madre provoca una autoagresión.

15.3.1 EXPERIENCIAS OBSOLETAS:

Es algo que se vivenció, que fue útil en algún momento y se hizo rígido. Es una generalización de la experiencia. Todo lo largo de la vida del adolescente va guardar experiencia, a veces queda en una experiencia obsoletas del tipo de cuerpo que tenía por su quince años, cuando era niño, con el fin de regresar al mismo puede hacer dietas extremas con la sopa de col para bajar de peso.

CapítuloV

16-Trastornos alimenticios, síntomas, características y tratamientos

16.1 Criterios de diagnósticos de la Anorexia nerviosa (según el DSM-IV)

Trastorno caracterizado por la presencia de una pérdida deliberada de peso, inducida o mantenida por el mismo enfermo. El trastorno aparece con mayor frecuencia en muchachas adolescentes y mujeres jóvenes, aunque en raras ocasiones pueden verse afectados varones adolescentes y jóvenes, así como niños pre-púberes o mujeres maduras hasta la menopausia. La anorexia nerviosa constituye un síndrome independiente, en el siguiente sentido:

A. Rechazo a mantener el peso corporal igual o por encima del valor mínimo normal considerando la edad y la talla (p. ej., pérdida de peso que da lugar a un peso inferior al 85 % del esperable, o fracaso en conseguir el aumento de peso normal durante el período de crecimiento, dando como resultado un peso corporal inferior al 85 % del peso esperable).

B-Miedo intenso a ganar peso o a convertirse en obeso, incluso estando por debajo del peso normal.

C. Alteración de la percepción del peso o la silueta corporales, exageración de su importancia en la autoevaluación o negación del peligro que comporta el bajo peso corporal.

D. En las mujeres pospuberales, presencia de amenorrea; por ejemplo, ausencia de al menos tres ciclos menstruales consecutivos. (Se considera que una mujer presenta menorrea cuando sus menstruaciones aparecen únicamente con tratamientos hormonales, p. ej., con la administración de estrógenos.)

Especificar el tipo:

Tipo restrictivo: durante el episodio de anorexia nerviosa, el individuo no recurre regularmente a atracones o a purgas (p. ej., provocación del vómito o uso excesivo de laxantes, diuréticos o enemas)

Tipo compulsivo/purgativo: durante el episodio de anorexia nerviosa, el individuo recurre regularmente a atracones o purgas (p. ej., provocación del vómito o uso excesivo de laxantes, diuréticos o enemas).

16.2-Anorexia nerviosa atípica

Este término debe ser utilizado para los casos en los que faltan una o más de las características principales de la anorexia nerviosa (F50.0), como amenorrea o pérdida significativa de peso, pero que por lo demás presentan un cuadro clínico bastante característico. Este tipo de enfermos es más frecuente en psiquiatría de interconsulta y enlace y en atención primaria. También pueden incluirse aquí enfermos que tengan todos los síntomas importantes de la anorexia nerviosa, pero en grado leve. Este término no debe de utilizarse para trastornos de la conducta alimentaria que se parecen a la anorexia nerviosa pero que son debidos a una etiología somática conocida.

16.3-Tratamiento

Cómo se trata la anorexia nerviosa?

El tratamiento de la anorexia nerviosa es un desafío porque la mayoría de las personas que tienen este desorden niegan que tengan un problema. Así como todos los desórdenes alimenticios, la anorexia nerviosa requiere un plan de tratamiento integral que es adaptado para cubrir las necesidades de cada paciente. Las metas del tratamiento incluyen devolverle a la persona un peso saludable, tratar problemas emocionales tales como la baja autoestima, corregir patrones de pensamiento distorsionados y desarrollar cambios de conducta a largo plazo. El tratamiento con mayor frecuencia involucra una combinación de las siguientes estrategias:

16.3.1-Psicoterapia

Este es un tipo de consejería individual que se enfoca en cambiar el pensamiento (terapia cognitiva) y la conducta (terapia conductual) de una persona con un problema alimenticio. El tratamiento incluye técnicas prácticas para desarrollar actitudes saludables hacia la comida y el peso, así como un aproximamiento para cambiar la manera como una persona responde a situaciones difíciles.

16.3.2-Medicación

Ciertas medicinas antidepresivas llamadas inhibidores selectivos de recaptación de serotonina (SSRIs) podrían ser usadas para ayudar a controlar la ansiedad y la depresión asociadas con un desorden alimenticio.

16.3.3Orientación de Nutrición

Esta estrategia es diseñada para enseñar un enfoque saludable a la comida y al peso, para ayudar a restablecer patrones normales de alimentación y para enseñar la importancia de la nutrición y una dieta balanceada.

16.3.4-Terapia de grupo y/o de familia

El apoyo de la familia es muy importante para el éxito del tratamiento. Es importante que los miembros de la familia entiendan el desorden alimenticio y reconozcan sus señales y síntomas. Las personas con desórdenes alimenticios podrían beneficiarse con la terapia de grupo ya que pueden encontrar apoyo y podrán discutir abiertamente sus sentimientos y preocupaciones con otros que comparten experiencias y problemas comunes.

16.3.5-Hospitalización

La hospitalización podría ser necesaria para tratar la pérdida de peso severa que ha dado como resultado la desnutrición y otras serias complicaciones de salud mental y física, tales como los desórdenes cardíacos, depresión seria y el riesgo de suicidio. En caso de desnutrición severa se podrían necesitar; fluidos intravenosos (en la vena), la alimentación a través de una sonda nasogástrica o una solución total nutricional parenteral (TPN). La TPN es usada por pacientes que no pueden o no deben obtener su nutrición comiendo.

16.4-Bulimia nerviosa (DSM-IV)

16.4.1 Criterios para el diagnóstico de F50.2 Bulimia nerviosa

Síndrome caracterizado por episodios repetidos de ingesta excesiva de alimentos y por una preocupación exagerada por el control del peso corporal lo que lleva al enfermo a adoptar medida extremas para mitigar el aumento de peso producido por la ingesta de comida. Este término debería restringirse a las formas del trastorno que estén relacionadas con la anorexia nerviosa por el hecho de compartir la misma psicopatología. La distribución por edades y sexo es similar a la de la anorexia nerviosa aunque la edad de presentación tiende a ser ligeramente más tardía. El trastorno puede ser considerado como una secuela de la anorexia nerviosa persistente (aunque también puede darse la secuencia contraria). A primera vista, un enfermo previamente anoréxico puede parecer que está mejorando a medida que gana peso e incluso recupera la menstruación si es mujer, pero entonces surge una forma maligna de comportamiento caracterizado por sobrealimentación y vómitos. Los vómitos repetidos pueden dar lugar a trastornos del equilibrio electrolítico, a complicaciones somáticas (letanía, crisis comiciales, arritmias cardíacas o debilidad muscular) y a una mayor pérdida de peso.

A. Presencia de atracones recurrentes. Un atracón se caracteriza por:

(1) ingesta de alimento en un corto espacio de tiempo (p. ej., en un período de2 horas) en cantidad superior a la que la mayoría de las personas ingerirían en un período de tiempo similar y en las mismas circunstancias.

(2) sensación de pérdida de control sobre la ingesta del alimento (p. ej., sensación de no poder parar de comer o no poder controlar el tipo o la cantidad de comida que se está ingiriendo)

B. Conductas compensatorias inapropiadas, de manera repetida, con el fin de no ganar peso, como son provocación del vómito; uso excesivo de laxantes, diuréticos, enemas u otros fármacos; ayuno, y ejercicio excesivo.

C. Los atracones y las conductas compensatorias inapropiadas tienen lugar, como promedio, al menos dos veces a la semana durante un período de 3 meses.

D. La autoevaluación está exageradamente influida por el peso y la silueta corporales.

E. La alteración no aparece exclusivamente en el transcurso de la anorexia nerviosa.

Especificar tipo:

Tipo purgativo: durante el episodio de bulimia nerviosa, el individuo se provoca regularmente el vómito o usa laxantes, diuréticos o enemas en exceso

Tipo no purgativo: durante el episodio de bulimia nerviosa, el individuo emplea otras conductas compensatorias inapropiadas, como el ayuno o el ejercicio intenso, pero no recurre regularmente a provocarse el vómito ni usa laxantes, diuréticos o enemas en exceso.

Bulimia nerviosa atípica

Este término debe ser utilizado para los casos en los que faltan una o más de las características principales de la bulimia nerviosa (F50.2), pero que por lo demás presentan un cuadro clínico bastante típico. Los enfermos tienen con frecuencia un peso normal o incluso superior a lo normal, pero presentan episodios repetidos de ingesta excesiva seguidos de vómitos o purgas. No son raros síndromes parciales acompañados de síntomas depresivos (si estos síntomas satisfacen las pautas de un trastorno depresivo debe hacerse un doble diagnóstico.

16.4.2TRATAMIENTO DE LA BULINIA NERVIOSA

Un programa de tratamiento de anorexia nerviosa tiene como objetivo prioritario la recuperación ponderal, muchos de los pensamientos alterados con respecto a comida, peso o figura están sustentados por la malnutrición.

La normalización de la dieta y los hábitos alimentarios son un paso fundamental en el proceso terapéutico. En segundo lugar está resolver los problemas psicológicos, familiares o sociales concurrentes en la anorexia nerviosa.

I. Recuperación ponderal

La rehabilitación nutricional y la normalización dietética corrigen las secuelas físicas y psicológicas que la malnutrición perpetúa, estas secuelas psicológicas tardan bastante tiempo en normalizarse después de haber conseguido la recuperación ponderal, éste debe ser el objetivo inicial del tratamiento de la anorexia nerviosa.

II. Tratamiento dietético

Es muy variada la opinión de si la realimentación debe partir de unos contenidos calóricos normales o bien reiniciarla a partir de dietas bajas en calorías, los diferentes autores no se ponen de acuerdo, si iniciarse en una dieta normal o si progresivamente se debe aumentar la cantidad de calorías. A pesar del riesgo aparente de una realimentación de valor calórico normal, en la práctica no suelen presentarse complicaciones, especialmente si ha sido evaluada correctamente.

No ocurre lo mismo con la alimentación nasogástrica y la parenteral con las que se deberá ser extraordinariamente prudente y este método no debe ser nunca el recurso frente a la falta de personal, o como solución excesivamente médica ante una paciente que esconde, tira, o pone dificultades a la alimentación.

Bien distinto es que en el programa de tratamiento dietético se incluya la alimentación por sonda como refuerzo negativo frente a una actitudes puntuales de rechazo de la alimentación, en esos casos puede estar aconsejada la sonda, pero sólo aplicada de una manera puntual, en un programa concertado y nunca dejarla permanente, que no sea una comodidad y sí un recurso terapéutico.

III.Tratamiento psicológico

El tratamiento psicológico es la piedra angular de un buen programa terapéutico en la anorexia nerviosa. Es bien sabido que las intervenciones psicoterápicas son poco efectivas en las fases más graves de la enfermedad, las pacientes malnutridas y en bajo peso se muestran extremadamente refractarias a la psicoterapia y difícilmente se observan cambios cognitivos hasta que no se ha recuperado determinado peso.

En este sentido la psicoterapia de apoyo, las técnicas de relajación y las sesiones psicoeducativas facilitarán el que la paciente no vea el programa conductual como excesivamente coercitivo dándole la visión de que únicamente está ingresada para ganar peso.

La terapia cognitivo conductual se ha revelado en la última década como la más efectiva en el tratamiento de la anorexia nerviosa y estudios controlados avalan su eficacia.

Para el modelo conductual la anorexia nerviosa sería un conjunto de conductas reforzadas por factores ambientales, que gratifican la delgadez, y por estímulos aversivos provocadores de ansiedad, la anoréxica no comería para evitar la ansiedad que le provoca pensar en el aumento de peso.

IV. Tratamiento farmacológico

El tratamiento farmacológico en la anorexia nerviosa está indicado como coadyuvante de las técnicas de modificación de conducta y como tratamiento de la psicopatología asociada, especialmente la depresión.

Con una acción más específica sobre el apetito se utiliza la ciproheptadina, un antihistamínico oxígeno especialmente indicado en la anorexia restrictiva y mucho menos en la purgativa.

De más amplia difusión han sido los antidepresivos, tanto la amitriptilina como la clomipramina se han mostrado efectivas en la anorexia nerviosa especialmente cuando se ha constatado la existencia de depresión asociada. Los efectos secundarios de los antidepresivos tricíclicos son los inconvenientes más importantes excepto la ganancia de peso que conlleva su utilización

Los modernos inhibidores selectivos de la receptación de serotonina se han utilizado en el tratamiento de la anorexia nerviosa.

V. Terapia familiar

Aunque al principio se mantenía a la familia alejada del tratamiento de las muchachas anoréxicas, progresivamente se fue implicando a la familia en los programas de tratamiento, tanto a nivel ambulatorio como en régimen de hospitalización.

VI. Régimen de tratamiento

Para la elección del régimen de tratamiento, ingreso hospitalario, hospital de día o tratamiento ambulatorio, no debemos guiarnos únicamente por el peso y la salud física del paciente, hay otros índices que nos ayudarán a tomar una decisión clínica muchas veces trascendental. Aunque el programa sea ambulatorio igualmente se precisa un programa de intervención complejo y bien estructurado que contemple las tres áreas de intervención: el peso, la figura y las cogniciones. Se necesita un programa de monitorización de comidas que asegure una dieta capaz de revertir el proceso de la malnutrición y facilite la intervención psicoterápica.

La familia deberá tener una información exhaustiva de la patología, sus complicaciones físicas y los riesgos de ciertas conductas de las pacientes, no sólo de la necesidad de tratamiento sino también cuál es el más correcto y qué modelo es el más efectivo. Otro aspecto a valorar por la familia y la propia paciente son los costes del tratamiento, no únicamente los costes económicos: aunque los seguros sociales costeen los gastos, en esta patología hay otros costes: la paciente tal vez deba sacrificar temporalmente estudios o trabajo y la familia al monitorizar y controlar sus conductas relacionadas con la alimentación deberá organizar y organizarse de manera diferente.

VII-Tratamiento en hospitalización

En pacientes con poca motivación, inestabilidad psicológica, trastorno psiquiátrico asociado y un ambiente familiar poco cooperador, es recomendable el ingreso, y obligado ante pérdidas del 25 al 30% del peso correspondiente en aquel momento según edad y estatura.

La intervención terapéutica sobre una paciente anoréxica en régimen de hospitalización precisa de un programa de tratamiento minucioso y exigente, compartido y aceptado por todas las personas que tratan a estas enfermas. Es preciso que este equipo sea multidisciplinario, formado por médicos, psicólogos, enfermeras y auxiliares; anotaremos con un énfasis especial que es imprescindible la formación y habilidad de todo el personal para el tratamiento de estas patologías, especialmente el de enfermería, sin cuyo concurso es muy difícil plantear un tratamiento en hospitalización. A este personal los psiquiatras y los psicólogos deben formarlo, asesorarlo y supervisarlo a través de programas de formación continuada.

16.5Síndrome por atracón:

El trastorno por atracón (adaptación del término inglésBinge-Eating Disorder(BED)) es un trastorno de la conducta alimentaria que se presenta con ataques compulsivos de bulimia. Comporta, en la mayoría de los casos, la existencia de aumento de peso e, incluso, de obesidad. El caso típico es el de una persona que siente periódicos deseos de ingerir alimentos de forma descontrolada (en ocasiones, sobrepasando la ingesta de 6000 calorías diarias), pero, a diferencia de la bulimia, no busca contrarrestar el atracón provocándose el vómito.

El trastorno por atracón es el trastorno alimenticio más común en los Estados Unidos, que afecta a un 3,5% de las mujeres y el 2% de los varones y es frecuente en hasta un 30% de aquellos que buscan un tratamiento para bajar de peso. A pesar de que aún no se ha clasificado como un trastorno independiente de la conducta alimentaria, se describió por primera vez en 1959 por el psiquiatra e investigador Albert Stunkard como "síndrome del comedor nocturno" (Night Eating Syndrome (NES)), y el término "trastorno por atracón" fue acuñado para describir la misma conducta alimentaria compulsiva, sin la connotación nocturna. El trastorno por atracón por lo general conduce a la obesidad, aunque puede ocurrir en individuos con sobrepeso. Pueden existir factores genéticos que predisponen al desarrollo del trastorno, independientemente de los riesgos para sufrir obesidad, y también parece existir una mayor incidencia de comorbilidad psiquiátrica con trastorno psiquiátrico del Eje I en un 78,9%, y para las personas con trastorno por atracón subclínico del 63,6%.

16.3.1-TRASTORNO POR ATRACONES (TA) (Definición según CIM 10)

Se caracteriza por atracones recurrentes en ausencia de la conducta compensatoria inadecuada típica de la bulimia nerviosa (p. ej. ) autoinducción al vómito, abuso de laxantes u otros fármacos, ayuno y ejercicio físico excesivo).

A. Episodios recurrentes de atracones. Un episodio de atracones se caracteriza por las dos condiciones siguientes:

1. Ingesta, en un corto periodo de tiempo, de una cantidad de comida definitivamente superior a la cual la mayoría de las personas podría consumir en el mismo tiempo y bajo circunstancias similares.

2 . Sensación de pérdida del control sobre la ingesta durante el episodio (p. ej. sensación de que uno no puede parar de comida o controlar qué o cuanto está comiendo).

B. Los episodios de atracones se asocian a tres o más de los siguientessíntomas:

1. Ingesta más rápida de lo normal.

2. Comer hasta sentirse desagradablemente lleno.

3. Ingesta de grandes cantidades de comida a pesar de no tener hambre.

4. Comer a solas para esconder su voracidad.

5. Sentirse a disgusto con uno mismo, depresión, o gran culpabilidad tras los atracones.

C. Profundo malestar al recordar los atracones.

D. Los atracones tienen lugar al menos dos días a la semana durante seis meses.

E. Los atracones no se asocian a estrategias compensatorias inadecuadas (p. ej. purgas, ayuno, ejercicio físico excesivo) y no aparecen exclusivamente en el transcurso de una Anorexia Nerviosa o una Bulimia nerviosa.

16.3.2Algunos signos y síntomas que puede manifestar un afectado son:

Ø Incapacidad para ejercer el control sobre el consumo de alimentos.

Ø Sentimientos de pérdida de control durante el atracón.

Ø Consumo inusual de grandes cantidades de alimentos a la vez, mucho más que una persona promedio.

Ø Consumo mucho más rápido durante el episodio de atracón que durante episodios habituales de alimentación.

Ø Ingieren alimentos hasta sentirse físicamente incómodos (indigestión) y con náuseas, debido a la cantidad de alimentos consumido.

Ø Come cuando está deprimido, nervioso o aburrido.

Ø Come grandes cantidades de comida, incluso cuando no tiene hambre.

Ø A menudo come solo durante los períodos de alimentación normal, debido a sentimientos de vergüenza.

Ø Se siente disgustado, deprimido o culpable después de comer en exceso.

Ø Experimenta una rápida ganancia de peso, o incluso un inicio repentino de obesidad.

Ø Sufre de depresión severa.

Ø Se irrita con facilidad.

16.3.3 Cómo se trata al trastorno por atracón?

El tratamiento para el trastorno por atracón es difícil porque la mayoría de la gente se siente avergonzada por el trastorno e intentan esconder su problema. A veces lo esconden tan bien que los otros miembros de la familia y los amigos no saben que se dan atracones.

Para los trastornos alimenticios hace falta un plan de tratamiento exhaustivo que se puede ajustar a las necesidades de cada paciente. La meta del tratamiento para el trastorno por atracón es ayudar a la persona tomar control de sus hábitos de comer. En la mayoría de los casos el tratamiento incluye una combinación de las siguientes estrategias:

1)Psicoterapia - Esto es un tipo de consejo que quiere cambiar la forma de pensar (la terapia cognitiva) y el comportamiento (la terapia del comportamiento) de una persona con un trastorno alimenticio. El tratamiento incluye técnicas prácticas para crear disposiciones sanas hacia la comida y el peso, y también formas para cambiar la manera en la cual una persona responde a situaciones diferentes.

2) Medicina - Ciertas medicinas antidepresivos llamadas inhibidores selectivos de la re-captación de serotonina (ISRS's) pueden ser útiles para controlar la ansiedad y la depresión asociadas con un trastorno alimenticio.

3) El consejo de una nutricionista - Esta estrategia ha sido diseñada para enseñar a la gente relacionarse sanamente con la comida y el peso, para ayudar a restaurar las formas normales de comer, y para enseñar la importancia de la nutrición y una dieta balanceada.

4) Terapia en grupo y/o de la familia - El apoyo de la familia es muy importante para el éxito del tratamiento. Es importante que todos los miembros de la familia entiendan el trastorno alimenticio y que reconozcan las señales y los síntomas. Las personas con trastornos alimenticios pueden beneficiarse de la terapia en grupo, donde les pueden apoyar otras personas con problemas y experiencias parecidos y pueden hablar de sus sentimientos y sus preocupaciones.

 
 

17. Cuestionario

17.1Justificación del cuestionario

El presente cuestionario tiene como objetivo en la investigación diagnosticar los trastornos de conducta alimentaria en el adolescente y tiene como título: «COMUNICACIÓN Y TRASTORNOS ALIMENTICIOS EN EL ADOLESCENTE», que se presentara como trabajo de investigación en la Universidad Laconcordia Campus Fórum Internacional. Además, nos ayudar a hacer énfasis sobre las conductas alimentarias de los adolescentes y dar una canalización, en caso que sea necesario.

Favor de poner una X en los cuadros de respuestas.

Sexo: Mujer ( ) Grado actual de estudios:________________

Edad: ____________________________ Fecha:_________________________________

 

Nunca

Casi siempre

Siempre

1. Tengo hábitos alimenticios que son diferentes de los de mi familia y amigos.

 
 
 

2. No puede pasar el día sin que me preocupe por lo que voy o no voy a comer.

 
 
 

3. Prefiero comer sola/o cuando sé que nadie me va a estar mirando Frecuentemente.

 
 
 

4. Invento excusas (ej. «ya comí», «no me siento bien». Etc.) Para no tener que comer con mi familia o amigos.

 
 
 

5. Tengo ataques incontrolables de ganas de comer durante los cuales consumo grandes cantidades de comida y luego me induzco el vómito.

 
 
 

6. De pronto me encuentro cortando mi comida en trozos muy pequeños, escondiendo comida para que crean que comí, masticando la comida y luego escupiéndola sin tragarla y/o manteniendo reservas de comida escondida.

 
 
 

7. He determinado que existen comidas «seguras» para mí para comer y que hay otras «malas» comidas las que me niego a comer.

 
 
 

8. Me enojo cuando otros muestran interés en lo que como y me presionan a que coma más.

 
 
 

9. Tengo miedo de no ser comprendida/o en mis miedos sobre la comida y la alimentación entonces no los comparto con nadie.

 
 
 

10. Disfruto de cocinar comidas gourmet/ de altas calorías para otros pero nunca las comería yo.

 
 
 

11. Paso largos períodos sin comer (ayunos) o comiendo muy poco de manera de controlar mi peso.

 
 
 

12. Mis amistades me dicen que estoy delgada/o, pero yo no les creo porque me siento gorda/o.

 
 
 

13. Uso laxantes o diuréticos como manera de controlar mi peso.

 
 
 
 

Verdadero

Falso

 

14. Tengo miedo descontrolado a subir de peso.

 
 
 

15. Me ejército en forma excesiva para perder peso y me vuelvo ansiosa/o si me salteo mis ejercicios.

 
 
 

16. Me es muy importante ser más delgada/o que el resto de mis amigos.

 
 
 

17. No puedo mantener un peso que es considerado saludable acorde a mi estructura corporal, edad y altura.

 
 
 
 

Si

No

18- Te das atracones de comida cuando te sientes triste, furiosa o frustrada?

 
 

19- Haces más ejercicio que de costumbre porque quieres bajar de peso para ser más atractivo/a?

 
 

20-Te molesta que te pregunten por tu manera de alimentarte?

 
 

21-Tienes terror a engordar para no ser más atractivo/a?

 
 

Figura 3. Pregunta 1

La mayoría tiene costumbre de diferentes que su familia sin embarco una muy buena parte siguen la conducta alimentaria familiar.

Figura 4. Pregunta 2

Es casi equilibrada la preocupación por la comida pero son más los que no son preocupados.

Figura 5. Pregunta 3

Se muestra aquí un gran timidez para la comida.

Figura 6. Pregunta 4.

La mayoría quieren comer solos /as sin embargo hay más 1/3 que disfruta comer en compañía.

Figura 7. Pregunta 5.

Hay una tercera parte que vomitan siempre después de comer.

Figura 8. Pregunta 6

La mayoría no tiene esta práctica.

Figura 9. Pregunta 7.

Esta equilibras las respuestas pero hay una diferencia mínima

Figura 10. Pregunta 8

Se nota que la mayoría comen sin presión de los demás.

Figura 11. Pregunta 9.

La mayoría no comparten su comida.

10. Disfruto de cocinar comidas gourmet/ de altas calorías para otros pero nunca las comería yo.

Figura 12. Pregunta 10

La mayoría disfruta la comida pero una tercera parte que dice que no por las calorías.

11. Paso largos períodos sin comer (ayunos) o comiendo muy poco de manera de controlar mi peso.

Figura 13. Pregunta 11.

Es una minoría que no pasa hambre.

12. Mis amistades me dicen que estoy delgada/o, pero yo no les creo porque me siento gorda/o.

Figura 14. Pregunta 12.

Están de acuerdo con lo que dicen sus amistades.

14. Uso laxantes o diuréticos como manera de controlar mi peso.

Figura 15. Pregunta 14.

Una cuarta parte usan laxantes para controlar su peso

15. Tengo miedo descontrolado a subir de peso.

Figura 16. Pregunta 15

Se nota mucho miedo a subir de peso

16. Me ejército en forma excesiva para perder peso y me vuelvo ansiosa/o si me salteo mis ejercicios.

Figura 17. Pregunta 16.

Hacer muchos ejercicios para controlar su peso.

17. Me es muy importante ser más delgada/o que el resto de mis amigos.

Figura 18. Pregunta 17.

Muchas ganas para competir por los pesos.

18. No puedo mantener un peso que es considerado saludable acorde a mi estructura corporal, edad y altura.

Figura 19. Pregunta 18.

Piensan la mayoría que si pero una buena parte no.

19 - Te das atracones de comida cuando te sientes triste, furiosa o frustrada?

Figura 20. Pregunta 19.

El estado de amino tiene influencia en la comida.

20- Haces más ejercicio que de costumbre porque quieres bajar de peso para ser más atractivo/a?

Figura 21. Pregunta 20.

La mayoría hace ejercicios con el fin de bajar de peso para su imagen corporal

21-Tienes terror a engordar para no ser atractivo/a?

Figura 22. Pregunta 21

La actuación física es lo máximo para estos adolescentes

Conclusión

A través de diferentes investigaciones podemos descubrir y deducir que los TCA son en realidad, un problema de orden capital en el adolescente. Cada vez más los medios de comunicación esta promoviendo la imagen corporal con lo más relevante de la vida, la promoción a la delgadez por los artistas, deportistas, políticos entre otros, los TCA van aparecer más en la adolescencia. A partir del principio de la adolescencia, muestra un gran interés para lucir el cuerpo y para socializarse con el medio, la imagen corporal es la manera que da al adolescente la seguridad y una autoestima.

Los diferentes modelos teóricos que hemos desarrollado en esta investigación demuestra que los adolescentes es parte una red de interacción entre el si mismo, la familia, la amistad y el noviazgo. En este caso podemos decir que los TCA son multifactorial y se debe de tratar caso por caso depende de la necesidad de cada paciente. Sin embargo, tienen algo en común que es la manifestación del trastorno. Pero nosotros como psicólogos, estamos invitados a ir más allá de los signos y síntomas para ver la causa profunda de cada paciente utilizando diferentes técnicas y métodos psicoterapéuticos, o en caso de que se requieren pedir ayuda a otros profesionistas en el área de la salud incluso de otras ciencias sociales y naturales.

Me quedo agradecido con este trabajo de tesis, ya que los adolescentes son parte de cotidianidad, convivo con ellos por más de 8 horas diarias. También me sirve de mucho aprendizaje en mis tareas de docente de Educación Media superior para mejorar la manera de tratar a los alumnos.

Propongo que todas las familias van a terapias y llevan un proceso terapéutico adecuado para la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de los trastornos alimenticios en los adolescentes y en la familia.

Además, me prepongo de crear un centro de apoyo integral con psicólogos de diferentes corrientes para atender los trastornos alimenticios. En dicho centro van a ver psicólogos de diferentes corrientes terapéuticas, médicos alópatas como homeópatas, dentistas, especialistas en deportes, investigadores, estudiantes. Es otras palabras hacer una comunidad terapéutica que se encarga de TCA y de problemas de salud ligado con eso.

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Anexos

Favor de poner una X en los cuadros de respuestas.

Sexo: Mujer ( ) Grado actual de estudios: ________________

Edad: ____________________________ Fecha: _________________________________

 

Nunca

Casi siempre

Siempre

1. Tengo hábitos alimenticios que son diferentes de los de mi familia y amigos.

 
 
 

2. No puede pasar el día sin que me preocupe por lo que voy o no voy a comer.

 
 
 

3. Prefiero comer sola/o cuando sé que nadie me va a estar mirando Frecuentemente.

 
 
 

4. Invento excusas (ej. «ya comí», «no me siento bien». Etc.) Para no tener que comer con mi familia o amigos.

 
 
 

5. Tengo ataques incontrolables de ganas de comer durante los cuales consumo grandes cantidades de comida y luego me induzco el vómito.

 
 
 

6. De pronto me encuentro cortando mi comida en trozos muy pequeños, escondiendo comida para que crean que comí, masticando la comida y luego escupiéndola sin tragarla y/o manteniendo reservas de comida escondida.

 
 
 

7. He determinado que existen comidas «seguras» para mí para comer y que hay otras «malas» comidas las que me niego a comer.

 
 
 

8. Me enojo cuando otros muestran interés en lo que como y me presionan a que coma más.

 
 
 

9. Tengo miedo de no ser comprendida/o en mis miedos sobre la comida y la alimentación entonces no los comparto con nadie.

 
 
 

10. Disfruto de cocinar comidas gourmet/ de altas calorías para otros pero nunca las comería yo.

 
 
 

11. Paso largos períodos sin comer (ayunos) o comiendo muy poco de manera de controlar mi peso.

 
 
 

12. Mis amistades me dicen que estoy delgada/o, pero yo no les creo porque me siento gorda/o.

 
 
 

13. Uso laxantes o diuréticos como manera de controlar mi peso.

 
 
 
 

Verdadero

Falso

 

14. Tengo miedo descontrolado a subir de peso.

 
 
 

15. Me ejército en forma excesiva para perder peso y me vuelvo ansiosa/o si me salteo mis ejercicios.

 
 
 

16. Me es muy importante ser más delgada/o que el resto de mis amigos.

 
 
 

17. No puedo mantener un peso que es considerado saludable acorde a mi estructura corporal, edad y altura.

 
 
 
 

Si

No

18- Te das atracones de comida cuando te sientes triste, furiosa o frustrada?

 
 

19- Haces más ejercicio que de costumbre porque quieres bajar de peso para ser más atractivo/a?

 
 

20-Te molesta que te pregunten por tu manera de alimentarte?

 
 

21-Tienes terror a engordar para no ser más atractivo/a?

 
 

* 1Coleman, J. (1985). Psicología de la Adolescencia. Ed. Morata. Madrid

* 2Marshall WA, Tanner JM (February 1970).  "Variations in the pattern of pubertal changes in boys"Arch. Dis. Child. 

* · 3Kohlberg, Lawrence. 1981. The Philosophy of Moral Development. Moral Stages and the Idea of Justice. San Francisco, CA: Harper & Row Pubs.

* 4 Guelar, D. y Crispo, R. (2000) Adolescencia y Trastornos del Comer. Ed. Gedisa. España.

* 5Macías-Valadez, T.G. (2000). Ser Adolescente. Ed. Trillas. México






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"Soit réservé sans ostentation pour éviter de t'attirer l'incompréhension haineuse des ignorants"   Pythagore